Golpe de calor: ¿Qué pasa y cómo actuar con un niño o bebé? Consecuencias y prevención

El golpe de calor es un trastorno ocasionado por el exceso de calor en el cuerpo, generalmente como consecuencia de la exposición prolongada a altas temperaturas

Conforme avanzan los días el verano se aproxima. Y este año se avecina una temporada estival con altas temperaturas, por lo que el riesgo de sufrir un golpe de calor es algo que debemos tener muy en cuenta estos días con la llegada de las temperaturas más extremas. En muchos puntos de España, desde este fin de semana se pueden superar los 40 grados de calor y a ello se habría de sumar el factor de la humedad excesiva, que puede producir la deshidratación del organismo.

A este tesitura también se añaden los episodios de las noches tropicales que ya se han ido produciendo y que se seguirán repitiendo, por lo que la prevención contra el calor es fundamental. También ocurre, por ejemplo, con alguna de sus consecuencias, como la llegada de las primeras plagas de mosquitos este verano. Será siempre recomendable:

  • Buena hidratación
  • Uso de ropas adecuadas
  • Evitar el color negro o prendas de ropa oscuras
  • Caminar por la sombra
  • Una alimentación adecuada
  • Evitar pasear por la calle en las horas de más calor

Así lo explican los especialistas de Sanitas en un artículo publicado por el Periódico.

¿Qué es un golpe de calor y por qué se produce?

De acuerdo a la web especializada MayoClinic, el "golpe de calor es un trastorno ocasionado por el exceso de calor en el cuerpo, generalmente como consecuencia de la exposición prolongada a altas temperaturas o del esfuerzo físico en las altas temperaturas".

"El golpe de calor es la forma más grave de lesión por calor y puede ocurrir si la temperatura del cuerpo alcanza los 104 °F (40 °C) o más. Esta afección es más frecuente en los meses de verano", explican.

"El golpe de calor requiere tratamiento de urgencia. El golpe de calor sin tratar puede dañar rápidamente el cerebro, el corazón, los riñones y los músculos. El daño empeora cuanto más se retrasa el tratamiento, lo que aumenta el riesgo de sufrir complicaciones graves o la muerte".

Síntomas de un golpe de calor y consecuencias en el cuerpo

Es fundamental que sepamos los síntomas de sufrir un golpe de calor para poder reaccionar a tiempo, ya que es una situación de alto riesgo que puede ser grave, sobre todo en personas mayores o en niños pequeños, tal y como os veníamos contando en esta noticia.

¿Qué siento si padezco un golpe de calor?

Primera fase:

  1. Dolor de cabeza
  2. Mareos
  3. Náuseas e incluso vómitos

Segunda fase, complicación del golpe de calor

  1. Calambres
  2. Elevación de la temperatura corporal (llegar a fiebre)
  3. Convulsiones
  4. Alteración de la conciencia
  5. Desorientación

Es el momento de reaccionar si no quieres que tu organismo diga 'basta'. Lo más recomendable si sufres un golpe de calor o insolación será acudir rápidamente a un servicio de urgencias o al puesto de socorro más cercano si estás en una piscina o en la playa.

Si no fuera posible, otras formas rápidas de actuación:

  1. Trasladar a la persona a un lugar con sombra y fresco
  2. Colocarlo en posición semisentada, con la cabeza levantada para favorecer la respiración
  3. Quitarle la mayor parte de ropa posible y darle aire
  4. Utilizar un paño de agua fría en nuca, frente, cuello y otras partes claves del cuerpo
  5. Hidratar a la persona, pero no de golpe. Pequeños sorbos de agua

Una vez mejore su estado, será preciso acompañarla al servicio médico para someterla a una revisión exhaustiva. Si perdiera el conocimiento y/o tuviera un mareo potente, habría que tumbarla con las piernas flexionadas y llamar inmediatamente a urgencias.

Insolación en niños. ¿Qué hacer?

En niños y/o bebés la insolación podría ser diferente, con otros síntomas más leves pero al mismo tiempo igual de peligrosos para ellos. Los niños pueden experimentar síntomas como debilidad muscular, falta de apetito, dolor de cabeza o tendencia al sueño. Además verían afectada su temperatura corporal hasta llegar a la fiebre.

En caso de insolación en niños, tendrás que:

  1. Guardar la calma y transmitirle tranquilidad
  2. Colocar al niño/bebé en un sitio frío
  3. Enfriar su cuerpo
  4. Mantenerlo hidratado, sin obligarle a beber para que no se atragante.

Tanto o más importante será la prevención. No expongas a tu bebé o niño pequeño a las altas temperaturas. Además tendrás que tener cuidado con el coche, que puede llegar a alcanzar más de 50 grados si está al sol. Será fundamental enfriarlo antes de introducir al pequeño/bebé en el vehículo.

Para prevenir una insolación en el bebé, entre otros trucos, podrás también ponerle ropa transpirable y cómoda.