Juan Carlos Mandiá, entrenador del Hércules, ha lamentado que desde el entorno de la entidad siempre se cuestione alguna cosa sobre el equipo y apuntó que sus jugadores deben tener "fuerza y madurez" para seguir compitiendo con éxito.

Mandiá reiteró su mensaje sobre que al Hércules se le está exigiendo más esta temporada de lo que se debería por la situación en la que se encuentra la institución y cómo arrancó el proyecto.

El técnico insistió en su idea de que, para el Hércules, alcanzar una de las seis primeras plazas de la clasificación esta temporada debe ser un "deseo" y no una obligación, y lamentó que ni el club ni él mismo hayan sabido "transmitir" ese mensaje.

"Nunca hay algo que nos ilusione, siempre hay algo cuestionable", sentenció el preparador gallego, quien argumentó que cuando el equipo ganaba partidos se criticaba el juego; cuando jugaban mejor, los resultados; y si no, la situación de algún jugador de la plantilla.

"Es un defecto seguramente del club y del entrenador, que no hemos sabido transmitir bien la idea", comentó Mandiá, quien añadió que deben "tener la fuerza y la madurez suficiente" para seguir adelante porque parece que en cada partido se están "jugando la vida".

Para Mandiá, cada partido es "un examen continuo para el equipo" y apuntó que así "no es fácil" trabajar, sobre todo tras un traspié como el de la última jornada frente al Deportivo de A Coruña (1-4).

Respecto al Recreativo de Huelva, rival el domingo del Hércules, explicó que "es un equipo muy organizado, que juega muy junto, con paciencia para esperar su oportunidad y que puede jugar a la contra porque tiene dos delanteros muy rápidos".

El preparador gallego aseguró que el Hércules irá a por el partido porque quieren "vivir este momento de la competición de esta manera", con ambición y no van a dar marcha atrás por la derrota de la última jornada.