La situación con la que se encontrará el Villarreal mañana a la vuelta de las vacaciones es casi dramática. El Submarino —con un partido menos— solo suma 15 puntos en 16 partidos y está con el agua al cuello, eso sí, a un punto de la salvación. Un panorama radicalmente opuesto al esbozado en agosto. Pero los números son los que son y Luis García es el técnico indicado para capear el temporal, porque ya se ha visto en una de estas. Asimismo los precedentes invitan al optimismo con más razón todavía, si se tiene en cuenta que el club hará un esfuerzo económico para reforzar la plantilla este invierno. Ni para recordar el ascenso se quiere hablar del efímero y reciente paso por Segunda, pero es una realidad que el equipo no ha dado muestras de acercarse a la zona tranquila de la tabla. La directiva confió hasta las últimas en Javi Calleja, pero a la hora de elegir su sustituto se ha apostado sobre seguro. Luis García tiene la experiencia en su hoja de servicios de resucitar un equipo abatido en la segunda parte del torneo e incluso soñar con Europa.

Un espejo en el que mirarse

Corría la campaña 2010/11 cuando el madrileño dirigía al Levante en su regreso a la élite. Un equipo con muchas limitaciones y que cerró sus primeros 16 partidos con el mismo puntaje que este Villarreal: 15. Los granotas tocaron fondo tras la Navidad con una derrota en el Pizjuán, que los dejaba colistas en la vigésima fecha. Tras esto Luis García y los suyos tuvieron un arranque emocional con un nivel de revoluciones altísimo para derrotar al Getafe. Desde ese punto lograrían 4 triunfos en 5 partidos y para finales de febrero ya casi doblaban la puntuación del primer tramo. En la jornada 32 la victoria frente al Hércules dejaba al equipo a 4 puntos de Europa y la salvación virtual, que luego se dilataría casi hasta el final. Un balance de 8 triunfos, 3 empates y 1 derrota (Madrid).

Números para la tranquilidad

Aunque 15 pueda parecer una cifra baja de puntos para lograr la salvación en los últimos 10 años hasta 26 equipos lo hicieron teniendo los mismos o menos puntos que el Submarino 18/19. Tanto es así que a poco que se mejorasen los registros se doblaría la puntuacion con cinco victorias en los 22 partidos restantes. El caso más llamativo fue el Zaragoza por partida doble, ya que en la 10/11 y en la 11/12 terminó manteniendo la categoría tras haber cosechado únicamente 10 puntos en 16 partidos.