El lateral izquierdo del Villarreal VillarrealXavi QuintillàEl futbolista finalizaba su contrato al término de la próxima temporada y, gracias a sus actuaciones durante este curso debido a las varias interrupciones que ha sufrido Alberto Moreno por lesión, han hecho que el jugador nacido en Lleida extienda su vinculación dos años más.

El '23' groguet aterrizó en las instalaciones deportivas de Miralcamp después de una etapa en fase decreciente en las categorías inferiores del FC Barcelona En La Masía estuvo desde 2009 hasta 2016, donde fue una de las sensaciones por el carril zurdo en todas sus etapas de crecimiento futbolístico menos en el filial azulgrana, donde la competencia y la irregularidad mermó su progresión debido a la poca participación que obtuvo sobre el terreno de juego. Su falta de oportunidades supuso un cambio de aires al final de ese curso saliendo cedido al Lleida, equipo donde empezó a dar sus primeros pasos en el mundo del fútbol. Allí creció, trabajó y sus condiciones le sirvieron para dar el salto a una de las canteras más poderosas a nivel mundial, y su regreso a préstamo fue el paso previo para recuperar sensaciones y salir rumbo a otra academia de formación con buena savia en sus filas en 2017, un año antes de lo que estaba reflejado en su contrato.

A día de hoy, el leridano consigue estabilidad en la primera plantilla tras haberse quedado a las puertas del fútbol profesional al caer dos veces consecutivas en los PlayOff de ascenso y de ganárselo a pulso posteriormente sobre el terreno de juego. Primero en la final ante el Elche y después en los cuartos de final frente al Melilla, aunque ya palpó las sensación de jugar en el primer equipo del Villarreal en nueve ocasiones, vio truncado su aspiración de ascender a Segunda División, pero Calleja tiró de sus servicios desde principio de curso. 16 encuentros en LaLiga Santander y cuatro en Copa del Rey rayando a buen nivel son los argumentos que sostienen su renovación. Además, desde el principio. La falta de continuidad de Alberto Moreno ha sido aprovechada por un Quintillà que, mediante sus características tácticas y técnicas, garantiza guerra por el carril zurdo de La Cerámica.

De esta manera, la directiva amarilla se rearma por la izquierda con vistas al futuro. El futbolista procedente del Liverpool, aunque haya sufrido cuatro percances físicos en lo que llevamos de curso, está ligado como groguet hasta 2024 y, y el canterano lo estará hasta un año menos que el andaluz. Pese a ello, es la apuesta de Fernando Roig a largo plazo junto a Pau Torres, central que está viviendo su primera experiencia en Primera División a un rendimiento inmaculado que le hace ser una pieza irremplazable.