Decía Guillermo Amor en los micrófonos de Movistar antes del partido ante el Ferencvaros que en el Barça lo importante era ganar partidos y que si eso pasaba, lo económico se iría arreglando.

Después del encuentro el club anunciaba las renovaciones Ter Stegen, De Jong, Lenglet y Gerard Ter StegenPiqué, algo que no es casualidad ya que esas operaciones están directamente relacionadas con la crisis financiera que azota al club blaugranba.

El club inició recientemente unas conversaciones con todos los deportistas profesionales del la entidad para lograr una rebaja salarial que permitiera equilibrar ingresos con gastos por la cual perdían parte de su salario que recuperarían cuando la entidad volviera a los niveles de ingresos habituales. Se va a establecer una mesa de negociación entre jugadores y club, pero entre tanto al menos tres (el único que todavía podría no haberlo hecho es Piqué, si bien con sus ampliaciones 'recuperarán' o se aseguran 'recuperar' esas pérdidas, que además se deben reajustar tras superar la crisis. Más años de contrato equivalen a más margen de maniobra para la entidad.

Según ha desvelado el diario 'Sport' la ampliación de Piqué, eso sí, está condicionada ya que si en la temporada 2021-22 no juega un 35% de los partidos, el club puede rescindirle de forma unilateral; si en la temporada 22-23 no juega un 35% de los partidos, el club puede rescindirle también. Existe también la opción por parte del propio Piqué de decidir no continuar en el club al final de cada una de estas temporadas si considera que ha acabado su etapa en el club.

Las cláusulas de rescisión también quedan afectadas. Lenglet queda en 300 millones de euros; De Jong, 400, y Piqué y Ter Stegen en 500 'kilos'.