Pablo Motos mostró este pasado jueves en 'El hormiguero' su indignación por las negociaciones de Pedro Sánchez para volver a investido presidente. En la habitual tertulia de los jueves, el presentador no dudó en expresar su opinión al respecto, llegando a ser muy tajante después de Tamara Falcó realizase una pregunta al respecto: "Es indignante, ¿pero cuál es la forma de frenar todo esto?".

"No sé cómo frenarlo, pero te puedo decir que llevo toda mi vida en los medios de comunicación, que ya son unos años, y nunca había sentido vergüenza de ser español, nunca me había pasado. Y probablemente si ahora viajara fuera y me preguntaran de donde soy diría europeo, porque no quiero decir que soy español, un lugar donde parece ser que hay presos políticos y, por lo tanto, este no es un sitio libre", comentó Motos.

Estas palabras de Pablo Motos se produjeron después de que sus colaboradores aportasen, respectivamente, datos y opiniones sobre las negociaciones que se están realizando para la investidura. Es bastante llamativo por la cantidad de cesiones del PSOE y las pocas renuncias del independentismo. Se pacta la amnistía, se pacta un mediador para seguir los pactos como si fuéramos una democracia anómala o amorfa, se pacta el traspaso de las competencias de Cercanías cuando incluso el Gobierno en algún momento dijo que podía ser ilegal y después se pacta una condonación de la deuda a Cataluña de 15.000 millones de euros", aseguró Cristina Pardo.

"Uno de los principios fundacionales del socialismo es la igualdad, y a mí este pacto me parece muy poco igualitario. No somos iguales en derechos, ni en deberes, ni a la hora de afrontar nuestras deudas", dijo posteriormente Pardo después de hablar de la quita de deuda a Cataluña, que también se realizará a todas las comunidades autónomas, añadiendo: "El mensaje con el que te quedas es que unos tipos que no han sabido gestionar y que son sospechosos de malversar les tengo que pagar yo la deuda. Pero, ¿por qué?".

Por su parte, Juan del Val intervino para apuntar al protagonismo como el motivo por el cuál aún no se había llegado a un acuerdo: "Como ya está todo concedido en el pacto de ERCse queda con poquito espacio para presumir de logros y yo creo que ha sido un ataque de celos, no sabemos si momentáneo o duradero". "Yo no hablaría de negociaciones, sino de chantaje. Ellos han puesto sus condiciones y ya está", dijo una Nuria Roca muy rotunda al respecto.