Alonso y Aston Martin vuelven al podio con autoridad

Aston Martin ha hecho los deberes de verano. Como cualquier estudiante aplicado que en vacaciones decide dedicar tiempo al “cuaderno de repaso”, el equipo inglés ha trabajado en julio, ya que está prohibido en agosto por reglamento, y ha introducido mejoras para volver a pisar el podio. Y lo consiguieron en una carrera loca por la lluvia y gracias a las manos de un extraordinario Alonso. El Aston era “fácil de conducir” dijo Fernando, algo difícil de entender desde fuera, a la vista del diluvio que cayó en Zanvoort. Lo bien cierto es que Alonso sale de Holanda con su podio número 105, la vuelta rápida en carrera y el premio honorífico de piloto del día. Los puntos que saca el asturiano este domingo le sirven para afianzarse en la tercera plaza del mundial de pilotos, detrás de los dos rivales de Red Bull.

El quinto puesto del otro piloto español puede saber a poco, pero el resultado de Sainz es tan bueno como el de Alonso, si se considera el pésimo rendimiento del Ferrari. Carlos peleó, especialmente al final de la carrera, en clara inferioridad de condiciones. Estuvo cerca del podio y tuvo el coraje para mantener a raya a Lewis Hamilton. Sainz está delante de Leclerc en la tabla y a los dos pilotos les espera, en menos de siete días, la carrera de casa. En Monza, con su escasa o nula exigencia aerodinámica, el Ferrari podría rendir mejor que en la pista de Zanvoort, donde los coches rojos han sufrido la falta de agarre.

La victoria, como parece ser la norma, fue de nuevo fue para Verstappen que, en su circuito de casa, recibió el apoyo de una afición holandesa entregada, como siempre, y con el ánimo propio del que ha visitado un coffeshop en Ámsterdam. Para Max son ya 11 victorias en 2023, 9 consecutivas, y a su lado, un Checo que es incapaz de plantar cara a su compañero con el mismo coche.