El valenciano Kike Trull tuvo que ser evacuado tras abandonar la Yukon Arctic Ultra por una hipotermia en la segunda jornada. «Un error de principiante», según explica el deportista de L´Eliana en Facebook, le hizo retirarse en su tercer intento. La considerada como la carrera ultra más fría y dura del mundo, de 700 km sobre nieve, hielo, y temperaturas de -50 grados que averiaron hasta los GPS, obligaron incluso a detener la prueba para asistir a corredores con congelaciones.

«Esta vez no me han echado, me he retirado yo. Estaba condenado a retirarme casi desde el principio ya que mojé toda mi ropa con sudor sin darme cuenta en las primeras horas de carrera», comenta Trull. «Durante la noche se congeló todo, y tuve que utilizar la ropa seca que gasto para dormir. De esa forma ya no podía parar, y tras toda la noche caminando me quedé literalmente sin fuerzas. Cuando intenté cocinar algo caliente que me diera fuerzas para los últimos 12 km, el hornillo me envió a escaparrar, así que no me quedó más remedio que apretar el botón y pedir ayuda», añade Trull, que se recuperaba de quemaduras en pies y manos. «La evacuación ha durado más de 24 horas, en moto de nieve y una noche en cabañas a -50 grados».

"Ya estoy de vuelta en el hotel de Whitehorse. Estoy leyendo crónicas sobre la carrera y estoy alucinando. Durante la carrera nosotros no nos enteramos de nada porque no vemos apenas gente ni tenemos información. Parece ser que hay bastante gente hospitalizada con congelaciones. Por suerte, no es mi caso. Tengo un poco chamuscados los dedos de los pies y un dedo de la mano que me congelé el año pasado. La verdad es que no me extraña en absoluto", añade en su página de Facebook.