El mejor año en la historia del fútbol femenino español

El Mundial se convirtió en el gran hito de una temporada complicada y que además dejó un Balón de oro como Aitana. La granota Alba Redondo también fue una de las mejores del mundo

Tomás Pérez durante la recogida del premio para Enith Salón

Tomás Pérez durante la recogida del premio para Enith Salón

Manel J. Ghelli

Manel J. Ghelli

El fútbol femenino ha vivido uno de sus grandes años en la historia después del Mundial conquistado con protagonistas de la ‘terreta’. Algunas de ellas de manera directa como es el caso de Enith Salón e Ivana Andrés y otras como Alba Redondo, del Levante UD, por ser una de las estrellas de un equipo valenciano y ser una de las mejores jugadoras del mundo. La mejor prueba de ello fue su presencia en la gala balón de oro donde fue una de las grandes destacadas. 

En el caso de las dos futbolistas valencianas cabe recordar que ya fueron homenajeadas por el Ayuntamiento de Valencia después de su exhibición en la cita mundialista, con mayor y menor influencia en el terreno de juego, pero siendo pesos pesados en el grupo. ««Es difícil expresar con palabras lo orgullosos que estamos y lo que sentimos viendo cómo hacíais historia y la gratitud que sentimos todas y todos pero especialmente las mujeres por romper una vez más esos techos que existen y por visibilizar el trabajo de las mujeres y la fortaleza que tiene el fútbol femenino en este país», señaló María José Catalá en ese momento. 

El premio, focalizado especialmente en Enith Salón por su fantástico nivel también con el Valencia CF y por su trayectoria en la entidad. Cabe recordar que en su caso además ha sido fanática del Valencia CF y su gran sueño era poder estar en la élite con el equipo que ama desde pequeñita, cuando ya se estaba formando en las categorías inferiores de un equipo que tiene como objetivo seguir creciendo en la élite. Mientras, Alba Redondo demostró desde su llegada al Levante UD que es una ganadora nata. Que solo quiere mejorar en lo individual y colectivo de la mejor forma posible, con mucho trabajo. 

En definitiva, el fútbol femenino tiene en Ivana, Enith y Alba a tres ejemplos del potencial de un deporte que año tras año no deja de crecer en el primer nivel. Y eso siempre es una buena noticia.