El otro día tiré un paraguas amarillo chillón. Me perseguía la imagen de Lucas cruzando los dedos cuando me vio aparecer con él. Así que, aunque después me saliera con que no es supersticioso y tal, en la basura está. Contra el Granada no puede fallar nada y en mi conciencia no quiero el peso de un color gafe. Además, así me ahorro una posible reprimenda del entrenador, al que hay cosas que no se le olvidan... Que se lo pregunten a Camarasa, del que tiene grabado a fuego aquella llamada al presidente tras volver a quedarse fuera de una convocatoria. Más allá del sopapo, el canterano está ahora en su mejor momento del curso y por suerte continúa en Orriols.

El calendario de los cobros

Confianza total con la pasta

Me cuentan que el pasado enero el club se retrasó con las fichas. Pero ¡alto, quietos paraos! Ni hay problemas de liquidez ni de tesorería ni el club es tan desastre. Y no, tampoco es que Quico estuviera ganando tiempo para ver a cuánto le subía la guinda de Bryan. Entre cesión, extra por la permanencia y ficha podría haberle salido por el millón bruto, un cálculo que más de uno ha hecho a título personal ahí dentro por si llega el día de pedirse un aguinaldo. En fin, que volviendo a lo otro, lo que pasó ni más ni menos es que la fecha de pago se retrasó unos días a propósito coincidiendo también con el permiso que se pilló Nacho, a la postre director financiero. A pesar de lo mirados que son con la pasta, para sorpresa de propios y extraños ni un solo jugador se intranquilizó por el asunto. Y es que lo más normal, dicen, es cobrar por adelantado.

Ppositivos y no por obligación

Por sensaciones y resultados

No es que antes hubiese mal rollo, pero el de ahora es mejor. Y eso que con la salvación a cuatro puntos las sensaciones no se corresponden con los resultados. Se nota en todo, en el día a día, en las caras, en los comentarios y empezando por las peñas hasta en la implicación del entorno y su respuesta a las iniciativas del club. Hay que ser positivos y no por obligación. Que el equipo sepa que a poco que dé, los granotas responden. Pese a la desgracia de Tebas, el lunes hay que estar en el Ciutat. Y confiar en Lucas, que más allá del paraguas amarillo, se conoce al Granada como la palma de su mano. Que se lo digan a Piti y compañía, que aun con Caparrós continuaban tirando de su pizarra.