CUATRO DÍAS DE BÚSQUEDA

La Policía recibió las imágenes de Álvaro Prieto un día antes de la aparición del cuerpo

Desde el 12 de octubre, la Policía Nacional explica paso a paso cómo discurrió la búsqueda del chico cordobés que apareció muerto el pasado lunes hallado por unas cámaras de televisión y defiende que todo se ajustó al protocolo

Isabel Morillo

La Policía Nacional ha relatado paso a paso cómo buscó a Álvaro Prieto desde que su familia denunció su desaparición el pasado 12 de octubre, cuando se le perdió la pista tras perder un tren de vuelta a casa, de Sevilla a Córdoba, y apagarse su móvil, en una noche de fiesta con sus amigos en la capital andaluza que tuvo un trágico final. En un comunicado, admiten que recibieron el domingo la cinta de la gasolinera que mostraba las imágenes del joven en el techo de un tren parado en los talleres de la estación de trenes de Santa Justa, donde perdió la vida tras caer fulminado al tocar un cable de alta tensión. Sin embargo, no fue hasta el lunes, una vez que apareció de forma fortuita el cuerpo del chico, cuando visionó la cinta al darse cuenta de que el ángulo de visión de las cámaras podría arrojar luz sobre la reconstrucción de los hechos, como efectivamente ocurrió.

En un comunicado extenso, la Policía da cuenta de su dispositivo de búsqueda, tras las críticas que han cuestionado que tras cuatro días sin éxito por parte de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, el cuerpo del joven cordobés apareciera de forma casual, registrado por unas cámaras de TVE, al moverse un tren averiado que llevaba parado desde el pasado 24 de agosto. La investigación arrancó el día en que se denunció su desaparición y “se siguió en todo momento el procedimiento establecido para este tipo de hechos”, defienden los agentes.

Hospitales y detenidos

El día de la denuncia, el 12 de octubre, una vez finalizada la misma sobre las 20.00 horas, la Policía estableció contacto con centros hospitalarios, asistenciales… "Se chequean las personas detenidas y se realizan otras gestiones varias, por si se hubiese registrado algún incidente con esta persona", explican.

Un día después, la mañana del viernes, 13 de octubre, la Policía Nacional, dado que las gestiones realizadas durante la tarde y la noche del día anterior fueron infructuosas, comienza la búsqueda con la reconstrucción de los últimos movimientos del desaparecido. “Se procedió a la búsqueda de testigos y a la petición de imágenes de seguridad a los establecimientos próximos a la estación de Santa Justa y se trabajó sobre varios avistamientos que resultaron negativos”, defienden sobre el procedimiento. “Se solicitaron mandamientos de localización del teléfono, y se realizaron varias gestiones, tales como solicitud de examen por parte de Renfe de las vías y de los trenes que habían transitado por esas vías durante la franja horaria de interés”, añaden.

A Carmona y Córdoba

El sábado, 14 de octubre, se realizó una búsqueda amplia por las inmediaciones de Santa Justa compuesta por agentes de la Policía Nacional, personal ferroviario y personal de la Unidad de medios aéreos (helicóptero y drones). El cuerpo de Álvaro Prieto había quedado encajonado entre dos vagones del tren donde recibió la descarga eléctrica, oculto a la vista, enganchado en la parte alta, por lo que era imposible verlo en este tipo de inspección ocular. “Las búsquedas de este tipo pretenden abarcar la mayor distancia posible por lo que se realiza desde Santa Justa hasta el término municipal de Carmona; y asimismo se amplía mediante una búsqueda a bordo de un tren hasta Córdoba”, explican los agentes que participaron en el dispositivo. El cadáver del chico cordobés estaba apenas a un kilómetro de la estación de Santa Justa y su muerte, según los datos de la autopsia, se produjo “alrededor de las diez de la mañana”. Alrededor de media hora antes, sobre las 9.30, hay registros en las cámaras de la estación del chico saliendo por su propio pie tras haber rechazado ayuda para cargar su móvil, según la versión de Renfe.

El domingo, 15, dado el resultado negativo de las anteriores gestiones, se centra la búsqueda, más exhaustiva y pormenorizada en las inmediaciones de la estación de Santa Justa, explica la Policía. A esta búsqueda se incorporan personal y medios de la unidad canina de la Unidad Militar de Emergencias especializados en la búsqueda de personas. Dicha búsqueda abarca la parte soterrada que comunica Santa Justa con San Bernardo, y es realizada en el momento en el que no hay circulación ferroviaria. Los perros se quedan a metros de donde el joven había perdido la vida.

El cuarto día de búsqueda, el lunes 16, el dispositivo conjunto de búsqueda con la UME continúa en las inmediaciones de la estación de Santa Justa y se dispone para la búsqueda en la zona de talleres y vías próximas en dirección hacia Córdoba. “En el momento del hallazgo de cadáver este dispositivo se encontraba actuando en dirección a dicho lugar, el cual iba a ser revisado en la misma mañana del lunes”, defienden.

“Tras el visionado de una cámara de un establecimiento próximo, que fue entregada a los investigadores el domingo por la tarde, se observa como el finalmente fallecido sube a la parte superior de un tren trepando justo por la intersección entre los dos vagones, y una vez en su parte superior instantáneamente cae fulminado al interior del hueco existente entre los dos vagones, donde quedó completamente oculto hasta que se produjo el movimiento de dicho tren la mañana del lunes”, defienden. Nadie ha explicado por qué esas imágenes de la gasolinera no se visionaron hasta que apareció el cuerpo.