Con San Emeterio y Guillem Vives. Jaume Ponsarnau pudo afrontar el partido de este sábado contra el San Pablo Burgos con los dos jugadores que salían de una lesión y con los descartes de Joan Sastre y Sergi García, pero el gran protagonista de los primeros minutos del partido fue un Rafa Martínez que salió en el quinteto inicial y que con un triple a los cuatro minutos agrandó su leyenda al convertirse en el máximo anotador de la historia taronja en la Liga Endesa.
La Fonteta se puso en pie para rendir homenaje a su capitán, pero la sorpresa llegó desde el videomarcador, con un mensaje de felicitación del propio Brad Branson, con quien estaba empatado a puntos antes del partido de ayer.
Un pequeño paréntesis en un primer cuarto que dominaron los de Ponsarnau desde el principio y en el que, con la aportación anotadora de hasta nueves jugadores, llegaron al final de los primeros diez minutos con un esperanzador 29-21 y con San Emeterio disputando ya sus primeros minutos.
Pero los locales no pudieron mantener el ritmo en el segundo cuarto y el menor porcentaje de acierto en el tiro fue aprovechado por el Burgos para meterse de nuevo en el partido hasta el punto de llegar al descanso con un inquietante empate a 48.
Los taronja tomaron nota, querían evitar sustos y salieron en la reanudación decididos a poner tierra de por medio. Con un inspirado Will Thomas y alentados por los tres mates que pudo hacer el estadounidense, el Valencia Basket se disparó en el marcador hasta lograr una máxima ventaja de 13 puntos (63-50).
Pero el Burgos no bajaba los brazos y, aprovechando los errores de los locales, volvieron a meterse en el partido. Van Rossom se fue al banquillo tras un golpe en la cara y los visitantes aprovecharon el desconcierto para ponerse a solo cuatro puntos (78-74).
Jaramaz empezaba a hacer daño a los locales y suyas fueron las canastas que llevaron al empate a 78 al inicio del último cuarto. Era el momento de incidir en el juego interior y aprovechar la clara superioridad de Dubljevic, Will Thomas y Mike Tobey en la pintura, los máximos anotadores junto a Matt Thomas en un día en el que los doce jugadores convocados sumaron puntos.
Las dificultades para llevar a cabo el plan obligaron a volver a jugar desde el triple y los errores en el tiro los aprovechó el Burgos para ponerse por delante tras un triple de Zipser (83-85) a falta de cuatro minutos para el final. Los tiros libres de Van Rossom y Doornekamp dieron aire al equipo, pero no fue hasta un triple de Doornekamp y dos tiros libres anotados por Will Thomas cuando La Fonteta respiró (94-90).