Un paso más hacia la Copa. El Valencia Basket prolonga su buena racha de resultados y lo hace con un partido de los que aumentan la autoestima colectiva, con siete jugadores por encima de los 10 puntos de valoración y otros dos que se quedaron con 9, para acabar ganando 79-63 al Movistar Estudiantes pese a la igualdad de la primera parte.

Una sobrecarga en el sóleo de la pierna izquierda hizo que Ponsarnau no pudiera contar con Guillem Vives para el partido ante el Movistar Estudiantes. Un contratiempo que lo es menos tras la recuperación de Sam Van Rossom, pero que frena el buen momento del catalán, que suma dos partidos consecutivos sin poder jugar.

Y fue el belga precisamente quien salió de inicio junto a Loyd, San Emeterio, Ndour y Tobey, en la habitual rotación del técnico cuando hay sobrecarga de partidos entre la Liga Endesa y la Euroliga.

El partido empezaba con intercambio de triples entre San Emeterio, Kadjii y Loyd, pero las defensas se impusieron a los ataques en un primer cuarto en el que Ponsarnau reservó a Dubljevic, Doornekamp, Abalde y Marinkovic. Kadji hacía daño saliendo de la zona y solo dos últimas canastas de Colom y Tobey evitaron acabar los primeros diez minutos con desventaja (16-15).

Con Abalde y el capitán ya en pista, el gallego empezó a asumir la responsabilidad ofensiva y, tras un mate que puso al público en pie, logró anotar otras dos canastas y un triple para llegar al descanso como máximo anotador con 9 puntos.

Los de Dzikic se aferraban a los triples de Dukan y al juego interior de Arteaga para mantenerse en el partido y no solo lo lograron, sino que consiguieron llegar al descanso con una mínima ventaja en el marcador (31-32), ayudados también por el bajo acierto de los taronja en los triples (3 de 13).

Marinkovic abrió la segunda parte con un triple en su primera acción del partido. Giedriatis respondió con otro acto seguido, pero el serbio no se quedó ahí y en unos minutos de especial inspiración, sumó otros cuatro puntos consecutivos que, sumados a otra canasta de San Emeterio cerró un parcial de 6-0 que puso por delante al Valencia Basket (42-39).

Pressey rompía la buena racha local, pero los taronja encadenaron un nuevo parcial de 9-2 que puso al público en pie, especialmente tras una última canasta a aro pasado de Quino Colom. Los taronja le había metido otra velocidad al partido y Estudiantes sufría para mantenerse en el mismo. Y más aún tras un último 2+1 de Loyd que elevó la ventaja local hasta los diez puntos antes del último cuarto (56-46).

El Valencia no podía dejar escapar ya el partido. La Copa estaba en juego y los tropiezos de algunos de sus rivales para lograr el billete a Málaga obligaban a ganar. Pero un parcial de 4-10 en el último cuarto volvió a meter al Movistar Estudiantes en el partido, con un Arteaga que seguía haciendo daño cerca del aro. Así, con 60-56 a falta de casi seis minutos, Ponsarnau se vio obligado a parar el partido con un tiempo muerto.

Y pareció hacer efecto con un triple de Loyd, aunque fuera respondido por otro de Douglas de inmediato. Cada posesión valía ya su peso en oro y ahí apareció Dubljevic en un 2+1 que devolvió cierta tranquilidad con siete puntos de ventaja en el marcador.

San Emeterio desde la línea de 6,75 y Marinkovic de nuevo en una rápida transición elevaron la ventaja hasta los 12 puntos (71-59). La Fonteta disfrutaba bufanda en mano a falta de 3:21 para el final. Los nervios aparecían en un rival al que le costaba anotar y que sufría en defensa y en los rebotes y la victoria se quedaba en casa en unos últimos minutos de gran inspiración de Ndour.