Ya desde la salida al calentamiento, y pese a que en el pabellón todavía restaban muchas localidades por ocupar, se vislumbraba lo que llegaría pocos minutos después. La noche era muy especial, regresaba por primera vez a 'casa' Rafa Martínez, la leyenda taronja que actualmente defiende los colores del RETAbet Bilbao Basket.
El eterno 17 del Valencia Basket se fundía antes de salir a la cancha en un enorme abrazo en el túnel de vestuarios con hombres como Bojan Dubljevic, Sam Van Rossom, Guillem Vives,..., con sus amigos, con esos en los que ha marcado una época en la entidad valenciana -hasta nueve jugadores con los que levantó la Eurocup la pasada campaña- durante un total de once temporadas. No en vano es el jugador más laureado de la historia de la entidad, con cinco títulos y diez finales disputadas en su palmarés con la elástica taronja.
La emoción comenzaba a invadirle, pero nunca imaginó que le desbordaría poco después. Y es que todo era poco para un hombre que se fue el pasado verano como el segundo en partidos jugados (626) y siendo el máximo anotador de la historia del club con 5.589 puntos, siendo además también el jugador con más puntos anotados en la Liga Endesa y en la Copa del Rey.
Por eso el club quiso estar ala altura y, con La Fonteta ya puesta pie ovacionándole antes de gritar su nombre, prepararle un homenaje a la altura de la ocasión. Un emotivo video en los videomarcadores que acompañó, probablemente, a la mayor ovación de la historia en el coliseo taronja, La afición, el club y todos los jugadores sobre la pista rendidos a Rafa Martínez. Emociones al límite y que siempre perdurará en la memoria colectiva de la familia de Valencia Basket. Sobre todo en la de una leyenda. Rafa Martínez.
