Se trata de un español converso radical chiíta, según los Servicios de Información, que piensan en una venganza por el activismo de Vidal-Quadras contra el régimen iraní. Las detenciones arrancaban en una vivienda alquilada hace un mes a nombre de la mujer detenida. Frente a la casa un vehículo movido durante la poda del Ayuntamiento, que la policía había fichado al ser grabado cerca de la vivienda de Vidal-Cuadras y su conductor también, el presunto autor intelectual del crimen. Las cámaras de los negocios también grabaron al presunto sicario. Reconstruyeron sus pasos hasta Fuenlabrada, donde apareció quemada. El día anterior ese supuesto sicario había sido identificado cerca de Zarzuela, un tunecino buscado en Francia por ajustes de cuentas. El dueño de la moto es el detenido en Málaga que dice que se la robaron.