Pese al fichaje de Rubén, el inminente de Verza y los contactos puestos en marcha con varias de las primeras opciones que la dirección deportiva maneja para reforzar la primera plantilla, el Levante se ha marcado como prioridad trabajar en la salida de los futbolistas que no entran en los planes de Lucas Alcaraz, quien ya el pasado mercado invernal propuso sacar las tijeras. La idea que está encima de la mesa es la de reducir las fichas profesionales a 20 o 21 para trabajar con un grupo más reducido, lo que además de rebajar el problema de las interminables listas de descartes técnicos permitirá un mayor desahogo económico a la hora de apuntalar algunas demarcaciones. En este momento hay alrededor de 14 futbolistas que tienen números para abandonar Orriols.

Las de Juanfran y Morales pueden ser las únicas renovaciones del verano, ya que después de que Diop comunicara que declinaba la suya y con la de Iván bloqueada, en este momento las posturas entre el club y Barral están bastante alejadas. De momento el delantero gaditano no está por la labor de aceptar la oferta de una temporada más otra opcional que se le ha trasladado y que está muy lejos de su objetivo de tres.

El resto de los futbolistas que terminan contrato está previsto que no tengan oferta para continuar. Entre ellos está Vyntra, que no ha llegado al cupo de partidos para renovar automáticamente, y tampoco dos de los tres fichajes invernales como son Ramis y Uche. El balear sólo firmó hasta final de temporada, mientras que el segundo sí que lo hizo con una cláusula para prolongar aunque con la idea de aprovechar el tirón y cazar un último contrato en el extranjero.

Sin embargo, el gran problema que se le presenta al Levante es el de los jugadores con contrato en vigor que no entran en los planes de Lucas. El club es reacio de momento a rascarse el bolsillo en rescisiones y se mantiene a la espera de ver cuáles de ellos podrían encontrar un destino en el que tener los minutos que aquí no han tenido ni tendrán. Un grupo nutrido en el que entran Jesús, Nikos, Pedro, Ivanschitz, El Zhar, Rafael, Xumetra y Víctor Pérez, cedido para dos años desde el Valladolid y en la MLS. Tampoco está garantizada la continuidad de Sissoko, el mejor pagado de la plantilla. El malí no está a gusto y sus agentes, que también lo son de Mariño y Pedro López, están manteniendo conversaciones con el club sobre los tres.