"Una mala racha está para romperla"

Miñambres asegura que solo será posible volver a "ilusionarse" con un triunfo ante el Racing; "nada de humo" y matiza: el equipo ha trabajado para "no desprotegerse"

Felipe Miñambres durante un entrenamiento

Felipe Miñambres durante un entrenamiento

Mario Monsalve

Mario Monsalve

El borrón y cuenta nueva tras el «bofetón» de la derrota ante la SD Amorebieta ya es efectivo. No queda otra y la plantilla del Levante UD ya mira, sin lamentos y con el mayor optimismo posible la cita en el Sardinero de este fin de semana. Es momento de reaccionar, porque aunque ahora los ánimos no estén por los aires, todo es posible porque así lo dice la calculadora: quedan 21 puntos en juego y el playoff está a cuatro. Y así como el Levante falló el pasado sábado, también lo hacen (y lo harán) sus rivales directos. Empezando por el Racing, el próximo rival. Está en manos de los hombres de Miñambres ganar y recortar a un rival directo, pero para eso habrá que poner en práctica todo lo trabajado para «corregir» errores que han costado caros.

Y esta vez Miñambres no se refirió a la falta de efectividad, que también, o a la fragilidad defensiva, que por ahora está ‘más controlada’ que en otros momentos del curso en los que el equipo encajaba con mayor facilidad. Ahora es cuestión de control, de saber gestionar la ansiedad. En este sentido, Miñambres reconoció ayer en la rueda de prensa post-cita en Santander que el equipo no estuvo bien al empatar el Amorebieta (1-1).

Entonces, con todavía minutos por delante, llegó la precipitación. Y eso generó «desprotección» atrás; un hándicap que llevó a los vascos a hacerse fuertes y favorecerse certificando la remontada (1-2). «Hemos dejado atrás ya muchas situaciones y lo del Amorebieta está superado. Está bien querer ir a ganar, pero no podemos desprotegernos tanto como el otro día porque eso nos hace vulnerable y eso no es bueno ni para jugadores ni para afición. Hemos estado hablando durante la semana y lo hemos visto: no queremos que nos vuelva a pasar, porque además el Racing es un equipo que deja a jugadores descolgados que pueden generarnos peligro», explicó el míster. 

Enésima final por la promoción

Espera un Sardinero a reventar. «Habrá un gran ambiente, será un partido de los que uno sueña con poder jugar», aseguró Miñambres. «Tenemos que hacer nuestro trabajo y olvidarnos del resto. Tenemos que tratar de ganar para volver a estar lo más cerca posible de los puestos de playoff. Lo más importante somos nosotros, el ambiente es propicio para tratar de reivindicarnos, para mostrar nuestras cualidades y talento. Lo más importante es centrarnos en nosotros, hacer las cosas bien y no cometer algunos de los errores de la semana pasada», insistió el preparador.

En este sentido, ganar además supondría un doble golpe sobre la mesa: volver a sumar tres y romper una racha que ya se extiende a doce partidos sin ganar lejos de Orriols. «Las malas rachas están para romperlas. Necesitamos sumar los tres puntos», aseguró el leonés.  

«No queremos humo»

El equipo, está, por lo tanto, listo para la batalla de Santander. Miñambres no quiere «humo», ni falsas ilusiones. Solo será posible «volver a ilusionarse» en caso de victoria. «Es fútbol y en el deporte y en el fútbol hay cosas que pasan que escapan a la lógica. Nos ha pasado a favor, como fue el día del Elche y nos ha pasado en contra, como contra el Amorebieta. No tenemos que mirar más allá del partido del Racing. Estamos capacitados, pero tenemos que mejorar en algunos aspectos. Podemos ilusionarnos a partir de algo y no de humo. A partir de tratar de ganar en Santander. Si ganamos allí nuestro espíritu será diferente al de esta semana», manifestó el preparador levantinista. 

Por último, Miñambres habló de su posible once y reconoció que mantendrá parte del bloque de las últimas citas, aunque sí habrá algún cambio de piezas. «Alguno habrá, pero no muchos. El problema es que fue un bofetón grande y sin protegernos. Lo del Amorebieta fue un bofetón», insistió, «pero trabajaremos para que no vuelva a pasar y si pasa -desprotección- que sea porque nosotros queremos».