El lastre de las cuatro primeras derrotas cada vez pesa menos. Después de seis jornadas de progresión constante, con dos victorias y cuatro empates, el Atlético Levante tiene por fin al alcance su primer objetivo: abandonar las zonas de descenso y play-out. Lo logrará esta tarde en Buñol (17:00 horas) de sumar los tres puntos ante el Sabadell, y más teniendo en cuenta que Saguntino y l’Hospi se enfrentan esta jornada a los dos primeros del grupo.

«Del primer mes de competición a este segundo se ha notado una gran mejoría en el rendimiento del equipo. Al principio pagamos una pretemporada en la que apenas habíamos trabajado juntos, por llegar tarde o estar en verano con Muñiz», alienta Koke, principal novedad en la convocatoria y posiblemente en la alineación, en detrimento de Sotres, tras su presencia en Anduva con el primer equipo. Portería al margen, Granero mantendrá el bloque que no solo fue capaz de puntuar por primera vez en casa del líder, Ebro, sino de ganar.

La solidez defensiva y las penurias a la hora de marcar, «ese puntito de gol que falta» al filial en opinión de Koke, equiparan a los granota y al Sabadell. Adelantarse en el marcador, por tanto, podría determinar el resultado del encuentro en favor de uno u otro. El brasileño Allyson, que como Koke es habitual últimamente con el primer equipo, repetirá como jugador más avanzado. El 5-4-1, con Manzanara adosado a los centrales, es la exitosa fórmula patentada por Granero.

«El puesto está muy caro», destacó también el meta andaluz, quien confía en que «no solo nos salvemos sino que no pasemos apuros como al final de la pasada temporada». Esa competitividad en la plantilla respalda su ambiciosa apuesta.

José Solivelles, debutante este año en el banquillo arlequinado (procedente de su filial), advirtió ayer que esta tarde «solo vale ganar». El cuadro catalán se encuentra prácticamente equidistante entre la parte alta y la baja de la tabla.