El Levante UD está virtualmente en Primera División. Lo dice la clasificación de LaLiga 1|2|3 y así lo entendieron también los más de 300 aficionados que celebraron en La Romareda una victoria con sabor a ascenso. Y es el que el post-partido, sin duda, fue una fiesta que hasta el propio Quico Catalán inmortalizó con su propio teléfono móvil. El presidente, a pie de campo y en compañía de otros consejeros, grabó los cánticos mientras los aficionados se encontraban a la espera de abandonar el estadio por razones de seguridad. Ni siquiera le frenó la insistencia de un empleazo del Real Zaragoza que lo instaba a marcharse. "No tenga prisa, que cuando acabe yo me voy", le dijo.
Minutos antes, el técnico zaragocista, Raúl Agné, había sido el primero en felicitar a Muñiz al despedirse de él. Lo hizo ante las cámaras de Movistar + dándole personalmente la "enhorabuena por el ascenso". Un guiño tras la victoria por 0-1 ante el que el preparador granota, fiel a su estilo, esbozó una media sonrisa, consciente de que el trabajo está encarrilado pero que como él dice "la Segunda es muy larga".
