Opinión

Isco desajusta el plan del Valencia CF

Los esfuerzos que tuvo que hacer el Valencia para neutralizar los ataques del Betis hasta el minuto 58 fueron muy grandes

El análisis de Manuel Grau del Valencia - Betis

Miguel Grau

El partido de la jornada 32 entre el Valencia C.F y el Real Betis Balompié comenzó con el equipo de casa comprometido y animado, intentando robar y correr desde posición defensiva, con su clásica forma 1.4.4.2 y con un plan diferente a los últimos partidos en ataque. El Valencia tenía un plan.

En el momento ofensivo el Valencia C.F trataba de organizarse en 1.3.5.2, poniendo a Jesús Vázquez en el carril izquierdo y a Fran Pérez en el derecho, posibilitando a Diego López aparecer en posiciones interiores y poder disponer de un momento con balón más largo en detrimento del rival. Un plan con mucho sentido, a no ser porqué Isco apenas dejaba poder ponerlo en práctica.

Los esfuerzos que tuvo que hacer el Valencia para neutralizar los ataques del Betis hasta el minuto 58 fueron muy grandes. Fue el minuto en el que Isco se fue al banquillo. Hasta entonces, el malagueño aparecía como hombre libre en el ataque del Betis donde el equipo más lo necesitaba, por ambas bandas y por el centro. Jugaba siempre con criterio y con infinidad de recursos al primer contacto, liberaba jugadores en ataque y desgastaba a la fuerte defensa del Valencia. En ocasiones parecía que el Betis no podía atacar si Isco no tocaba la pelota. Cuando pasas tanto tiempo utilizando tus recursos en este tipo de esfuerzos defensivos es muy difícil poder atacar con claridad, combatir al rival se dificulta mucho, y esto es lo que le pasó al Valencia mientras Isco estuvo en el campo.

A partir de la sustitución, el Betis dejó de atacar con tanta fluidez y precisión, fruto de eso el plan del Valencia, junto con los cambios, surtió efecto y desde un córner, que propició el penalti, consiguió el empate. Fueron minutos en los que el Valencia pudo pensar también en atacar y no estaba siendo sometido como al principio y que, aunque no consiguiera la victoria, se vio una versión mejorada del equipo de Baraja. El antes y el después de Isco en el campo condicionó mucho la táctica y la forma de interpretar el juego de ambos equipos. Fue diferencial.

El gol final del Betis puso la victoria del lado de los visitantes y complica el objetivo valencianista de estar en puestos europeos, pero sigue estando cerca. Mestalla seguirá empujando a un equipo que lo da todo, hasta el final.