El Mar Sagunto perdió por 26 a 32 en su enfrentamiento con el líder de la división de honor del balonmano femenino, el Itxako de Navarra. El tanteador no hizo honor a la realidad y las navarras obtuvieron demasiado botín para su propuesta de juego, al contrario que las de Mayo, que acabaron desfondadas físicamente y desquiciadas por una pareja arbitral que se cebó con las valencianas.

El Itxako fue de menos a más y pasó más apuros de lo que aparenta si alguien ve sólo el resultado final. En la primera mitad las ventajas eran siempre del bando valenciano, con rentas de hasta cuatro dianas, hasta que al descanso se llegó con el liderazgo en el marcador de las visitantes merced a un penalti anotado con el reloj a 0. Era el 15 a 16. Las espadas estaban por todo lo alto.

En la segunda mitad las navarras empezaron a poner tierra de por medio, aunque se pasó de un 14 a 19 a un 21 a 22 en pocos minutos. Alicia Fernández fue el revulsivo que buscaba Mayo en la dirección del juego y en la defensa a la central navarra, Macarena. Fruto de esta presión se vivieron los mejores momentos de la contienda con un Sagunto respondón ante un líder que se desinflaba. Al final la profundidad de la plantilla visitante y una serie de decisiones arbitrales más que discutidas colocaron el engañoso 26 a 32 con el que acabó el duelo entre dos de los grandes del balonmano nacional.