«Ha sido una decisión tomada por el club que quizá no sea la más cómoda para todos. Tenemos que responsabilizarnos de la situación que está viviendo y tratarlo con el máximo respeto posible, porque ha sido uno de los jugadores que ha estado en una parte histórica del Valencia y ojalá se pueda resolver pronto». Así de claro se mostró el consejero responsable del área deportiva Fernando Gómez, cuando se le preguntó si el tratamiento que está recibiendo Angulo es el correcto tras 14 temporadas vinculado a la entidad. El asturiano continúa ejercitándose al margen del grupo y en un horario distinto al elegido por Unai Emery, y aunque la intención de las dos partes es alcanzar un acuerdo para rescindir el año de contrato que le queda a lo largo de esta semana, de momento, el inquilino del ´10´ continúa apartado y sin cruzar palabra con Emery.

En las últimas horas, Javier Gómez y José Luis Tamargo —representante de Angulo— han mantenido varias conversaciones telefónicas para llegar a un acuerdo económico con el que cerrar su salida, pero a día de hoy no ha entente. El VCF le plantea dos opciones; bien abonarle completamente el año que le queda si decide retirarse o bien pagarle la diferencia que exista entre la propuesta económica de su nuevo club con el contrato que tiene a día de hoy para que no pierda dinero. De momento, como aún no ha dado luz verde a ninguna de las propuestas que ha recibido su representante, la situación continúa sin solucionarse, aunque donde sí coinciden las dos partes es en que no participe en la presentación del equipo del próximo sábado, ya que se consideraría una «humillación». La intención de Manuel Llorente es no prolongar en exceso la situación del asturiano, más allá que la decisión de que se ejercite al margen de sus compañeros sea exclusiva de Emery, que no habla con él desde que le comunicó en persona la decisión antes de comenzar la pretemporada. Angulo firmó por la entidad de Mestalla cuando tenía 17 años procedente del Sporting de Gijón sin coste alguno, ya que lo fichó Jesús Martínez mediante un cambio de residencia después de enviar una semana a Gijón a Manuel Maciá y José Ramón Fuertes, que le siguieron en varios entrenamientos y en el partido del Sporting B contra el Real Unión de Irún. En total han sido 15 temporadas, pero la entidad considera que su ciclo en Mestalla ha finalizado y Unai prefiere que entrene al margen de sus compañeros, de ahí que ayer volviera a estar a disposición del preparador físico del juvenil que, después de hablar en la Ciudad Deportiva con Fernando, le ha preparado varias sesiones de trabajo a las 10.30 horas, a excepción del viernes que tendrá el día libre, cuando el equipo tiene previsto entrenar tanto por la mañana como por la tarde. Y así seguirán evitándose técnico y jugador.

Varios jugadores han hablado con Angulo para tratar de animarle, ya que no es una decisión agradable tener que entrenar al margen de tus compañeros, más allá de que el pasado curso vivió una situación parecida cuando Koeman cogió las riendas del equipo, al «apartar» al asturiano, Albelda y Cañizares. Emery es partidario de que no trabaje con el grupo y el club, con Manuel Llorente a la cabeza, ha respaldado la decisión del técnico. En los próximos días se espera poner el punto y final a una situación que se arrastra del curso anterior, aunque no fue hasta dos días antes de empezar a entrenar cuando el propio Emery le comunicó la decisión.