Desde que aterrizó en febrero ha cumplido siete meses en Valencia, ¿ya se encuentra totalmente adaptado al club y a la ciudad?

—Me encuentro fenomenal. Mi llegada aquí en febrero, a mitad de temporada, fue muy buena para empezar ahora más adaptado al club, al sistema de juego, a los jugadores… Ya conozco más las características de cada compañero. Para mí, esos meses de aclimatación han sido muy positivos.

—Sobre todo, para un brasileño. De ustedes siempre se dice que sufren la típica ´saudade´ o morriña.

—Tengo un poco de saudade, sobre todo, echo mucho de menos a la familia. En Brasil se quedaron mis padres y mis hermanos. A veces vienen para un par de meses y vuelven, se van turnando… Se añora también a los tíos, a los primos… Mi tía tiene un niño de cinco años del que soy padrino, Joao André. Está lejos y sólo puedo hablar con él por teléfono; la saudade y las ganas de verlo son grandes.

—Y en lo futbolístico, ¿se añora al Jonas de Gremio, estamos viendo al mismo?

—En el Valencia estoy jugando algo diferente, pero me gusta mucho este juego, participar más en las jugadas. En Brasil estaba centrado en el frente de ataque, liberado de otras funciones colectivas. Me gusta porque disfruto dando pases de gol. El año pasado con Gremio hice muchos goles, pero también di muchas asistencias. Aparte del máximo goleador, allí fui el que más pases decisivos dio. Me encanta llegar por detrás del delantero con el balón y escoger la mejor opción. Estoy contento en el Valencia, quiero continuar así, voy a trabajar fuerte para cuando me necesite el míster estar listo y ayudar al Valencia a vencer partidos.

—Mestalla disfruta con un mediapunta que juega con la cabeza levantada y que prefiere tocar rápido antes que perderse en regates.

—Es cierto, no soy un futbolista egoísta, me apasiona el futbol colectivo y así lo pienso en la cabeza. A veces hay que ser individualista en algunas jugadas, pero lo más importante se consigue en equipo.

—En media año liguero sumó 711 minutos, en los que dio tres asistencias y anotó tres goles. ¿Superará la progresión con todo un curso por delante?

­—Mi meta es mejorar poco a poco, estar más satisfecho jugando más. Para eso necesito entrenarme muy fuerte día a día. Esta temporada lo que quiero es dar muchos pases de gol y convertir muchos tantos porque serán importantes para todos.

—¿Son posibles las ´dobles figuras´ como en el baloncesto? Más de diez goles, más de diez asistencias…

­—Sí, y voy en busca, con esa idea. Serían unas cifras muy buenas.

—Eso sí, los puestos de arriba están carísimos con un sinfín de alternativas: Piatti, Bernat, Canales, Soldado, Aduriz, etc.

—Sí, pero debe ser así porque tenemos tres competiciones importantísimas por delante, muchos partidos por jugar. La competencia ha aumentado el nivel del equipo y no solamente en el frente de ataque, sino que también en el medio, la defensa, los laterales… El Valencia está fuerte para las tres competiciones, cuenta con un grupo muy competitivo, de mucha calidad. Necesitamos de todos para completar una gran temporada.

—Por cierto, se ha visto a Jonas acoplarse a la punta y a la mediapunta. Incluso, en los amistosos ha jugado por derecha e izquierda.

­—Sí, pero por la banda derecha no me gusta. Ya hablé con Unai (Emery) y se lo dije. Si alguna vez hay que actuar en los extremos, prefiero hacerlo por la izquierda para ir hacia dentro. Incluso, cuando empezaba jugaba bastante ahí. Las posiciones donde he jugado en Brasil son: mediapunta o segundo delantero, punta y extremo izquierdo. Ahí no hay problema.

—Frente al Racing su aparición en la mediapunta fue como un milagro. El partido, con 2-3 en contra, tenía muy mala pinta.

—Sí (ríe)… Miré al vídeo-marcador y me dije: ´36 minutos y 2-3, ¡madre mía! Necesitamos hacer muchas cosas´. Nos fragmentamos, ocupamos los espacios con mucha movilidad; estoy muy feliz porque pude ver ese pase para Soldado, más todavía, cuando vi que él cruzó de maravilla el balón para marcar. Pude ayudar al equipo a remontar y salimos de Mestalla con una grandísima victoria, muy importante en los comienzos.

—Jonas-Soldado. Suena bien como sociedad en ataque, ¿cómo lo ve?

—Me entiendo bien con él, es fácil darle el pase porque Roberto es genial en los desmarques. Soldado es un delantero muy inteligente, como Aritz (Aduriz), Piatti… Todos los atacantes son rápidos, móviles y listos, pero Roberto está en un gran momento, haciendo muchos goles, algo que para el equipo es imprescindible.

—Usted lo ha dicho: «Victoria importantísima para empezar». ¿Se imagina como hubiesen sido estos días sin fútbol con una derrota?

—Uff, hubiese sido muy duro pasar tantos días sin la oportunidad de tomarse la revancha y pensando en una derrota. Por suerte, podemos decir que ya sumamos tres puntos en la clasificación.

—Lo que sufrió el VCF y, por otra parte, la comodidad aplastante con la que vencieron Madrid y Barça.

—Sí… Seguí por la tele el partido del Barça-Villarreal y vi un equipo impresionante, sólamente con el mediocampo mantienen el balón durante todo el partido, con toques, con asistencias súper peligrosas, juego ofensivo, etc. Son dos equipos de gran nivel que van estar en la cabeza, los dos juegan a un ritmo muy alto. Nosotros tenemos que ir por fuera en la ´carrera´ para darles una sorpresa o estar cerca de ellos, aunque será difícil.

—¿Se puede?

—Posible es, pero es muy complicado. Lo sabemos, Barça y Madrid tienen jugadores de altísima calidad. Nosotros también tenemos condiciones, sino para pelear por el título, por lo menos para clasificarnos terceros. Sería un buen objetivo para estar la temporada que viene en la Champions.

—La temporada pasada debutó en la Champions con sólo 16 minutos en la derrota de Gelsenkirchen. Me consta que esta campaña la espera con una motivación especial y dispuesto a tomarse la revancha.

—La afronto con muchísima ambición. Un motivo por el que vine a Valencia es porque disputa grandes campeonatos como la Champions y para el currículo de un jugador eso es fantástico. Para mí, el poder comenzar la Liga de Campeones desde la fase de grupos, desde su principio, es cumplir un sueño porque es la mayor competición del mundo. Todo el mundo está pendiente de ella, la sigue por la televisión. Confío en que todos nos tomemos la revancha y pasemos más rondas que el año pasado. Es la ambición y el objetivo de la plantilla… Verse en las rondas finales de la Champions.

—¿Qué pasaba por su cabeza cuando veía la Liga de Campeones por la televisión hace uno o dos años?

—Soñaba con llegar a Europa y disfrutar de la Liga de Campeones. En Brasil todos la miran, hablan de ella,… Es una competición mundial a nivel de aficionados. Hoy estoy aquí, puedo disfrutarla en primera persona y debo aprovechar al máximo la oportunidad.

—Chelsea, Bayer Leverkusen y Genk. ¿Qué opinión tiene de los rivales del grupo E?

—Es un grupo difícil porque tenemos al Chelsea. No hay que decir mucho de un súper equipo así. El Bayer Leverkusen, donde juega un muy buen futbolista brasileño, Renato Augusto, y el Genk, que por algo será el actual campeón de Bélgica. Son tres rivales de calidad, pero eso no cambia nuestro primer reto de plantarnos en los octavos de final.

—De momento, Miguel se queda. Supongo que estará satisfecho porque ha sido clave en su integración.

—Cuando llegué los portugueses me ayudaron mucho por hablar el mismo lenguaje. El español no es difícil, es parecido y me comunico ya perfectamente con todos. Me siento tranquilo, adaptado. Ahora bromeo también con los españoles o con un ´figura´ como Piatti (risas). Me siento muy bien. Miguel me ha ayudado mucho, tiene una historia de seis años con el VCF y tiene ganas de jugar aquí, ganar títulos y estar bien.