El ayuntamiento de Riba-roja aprobó este miércoles en pleno municipal acatar la sentencia del Supremo que anuló el PAI del Valencia CF, pero dejó abierta una puerta para encontrar en el futuro alguna vía de diálogo entre las partes a fin de evitar graves consecuencias jurídicas. Así, el nuevo Consistorio rechazó al menos por el momento la propuesta de iniciar los trámites que llevarían a incluir gran parte de estos terrenos en el Parque del Túria, una medida que impediría cualquier actuación urbanística sobre los mismos en el futuro. Hay que recordar que el Valencia, a través de Amadeo Salvo, acordó con los bancos que tienen la propiedad de los terrenos de Porxinos iniciar un nuevo proyecto acorde a la legislación vigente una vez que el tribunal dictase sentencia, para así evitar reclamaciones multimillonarias entre todas las partes afectadas, entre ellas el propio ayuntamiento. La propuesta de Podemos y Salvem Porxinos, al menos por ahora, queda aparcada hasta disponer de los necesarios informes.

Lo que sí quedó aprobado fue abrir una investigación para depurar posibles responsabilidades por posibles delitos cometidos con el «pelotazo» de Porxinos, que es como en su día lo calificó el promotor y entonces presidente del Valencia, Juan Bautista Soler. Miembros del anterior equipo de gobierno y técnicos municipales que firmaron el proyecto estarían bajo sospecha.