Cuatro goles en 35 minutos fue la huella que dejó Santi Mina al conjunto de Paco Jémez la temporada pasada.

El joven vigués empezó a escribir su historia futbolística contra el Rayo Vallecano en un partido que consagró al nuevo refuerzo del Valencia como jugador de Primera División. Además, la baja de Feghouli para el partido de Vallecas, abre un abanico de posibilidades para que Nuno pruebe a jugadores menos habituales en el once. Aunque el luso tiene su confianza depositada en Piatti, uno de los miembros de la plantilla que podría ser agraciado con un puesto en el once sería Santi Mina.

Parece que la decisión de Nuno Espirito Santo al apostar por Rodrigo en la banda izquierda, no deja más espacio al ´22´ que el carril derecho, una vez que se ha visto que el puesto de delantero centro es fijo para Alcàcer y Negredo. Otra opción sería si el preparador portugués considera la posibilidad de jugar con dos puntas, pero los ensayos previos al partido no apuntan por esa dirección. En cualquier caso, si quiere Nuno, no hay problema porque los cuatro goles que le hizo Santi Mina a los de Paco Jémez la temporada pasada fueron precisamente arrancando desde la banda derecha.

Empieza el festival de Mina

Ese día Santi acabó con una mala racha que le acompañaba durante todo el curso, pero la rompió contra el Rayo con un póker de goles en un partido que acabó 6-1 y en el que Mina fue vitoreado por Balaídos al salir del terreno de juego en el minuto 71. Su primera ocasión fue un cabezazo, entrando con potencia desde la derecha, que salió desviado a la izquierda de Toño. Ese remate fue el único de los cinco disparos que intentó que no saboreó la red franjiroja, el resto de balones que pasó por el delantero acabaron cruzando la línea de gol. La fiesta de Mina empezó en el minuto 21 con un pase entre líneas de Nolito, su mejor socio en ese encuentro. El extremo gaditano se plantó en la frontal tras un recorte y asistió al actual jugador del Valencia que definió cruzando una pelota rasa ante la que Toño poco pudo hacer.

En ese instante el marcador era favorable al Celta por 2-1 y aunque Larrivey marcó el tercero, el portero alicantino no sabía el recital que iba a presenciar por parte de un futbolista de 19 años que iba a meter un hattrick en 16 minutos, eso si con un descanso de por medio.

El inicio del segundo tanto fue un calco del primer gol de Mina, pero cambiando de protagonista a la hora de asistir. Esta vez fue Krohn-Dehli, quién con un toque se deshizo de la zaga franjiroja, para soltar el balón a un Mina libre de marca que anotó picando la pelota. Al punta gallego se le fue el control, pero demostró con su definición la cantidad de recursos que tiene para alimentarse del gol.

Otra vez desde la derecha

Esto lo volvió a demostrar la tercera vez que empujó el esférico a las redes del Rayo Vallecano. De nuevo entrando desde la derecha, Santi Mina realizó un testarazo digno de un ´9´. El de Vigo recibió un centro de Orellana desde la izquierda, que el delantero cabeceó a la base del palo, con un giro en el remate que dejó a Toño ´congelado´, y completando una gran noche con su hattrick.

Pero el festival de Mina no acabó ahí pues el colofón final fue otro despliegue de sus cualidades en el campo. Santi se desmarcó en una jugada en la que Nolito conducía el balón. El ´10´ celtarra vio el movimiento del actual punta valencianista y completó la jugada con una magnífica asistencia entre los centrales del Rayo Vallecano. Si el pase fue una delicia, la manera con la que el atacante resolvió el lance con Toño fue fácil pues con dos toques, regateó al cancerbero y solo tuvo que empujar el balón al fondo de la malla para finiquitar un partido en el que Santi Mina dejó huella.

Probó como teórico titular

Una victoria que el actual ´22´ del Valencia desea repetir con su nuevo equipo en el feudo del Rayo Vallecano. Para intentar rehacer la épica necesita de la confianza de un Nuno que en las pruebas de este viernes en el Antonio Puchades probó con Mina en el teórico equipo titular que portaban los petos.

Este partido en el que Mina se salió contra el Rayo es una prueba de que el rendimiento del jugador se adapta al juego desde la banda derecha, pues con la competencia de Nolito era misión imposible desbancar al gaditano del carril zurdo vigués, por lo que Nuno podría tenerlo en cuenta para su once.

Cuando empezó a despuntar con el juvenil celeste, Santi Mina si ocupaba la banda izquierda para aprovechar sus diagonales, pero la presencia de Nolito hizo evolucionar la polivalencia del fichaje del Valencia para beneficio de Nuno.