El Valencia Mestalla, a diferencia del primer equipo, ha reaccionado. Los de Curro Torres han salido del pozo del descenso a Tercera División encadenando tres victorias consecutivas contra el Sabadell, Atlético Baleares y Llosetense. El equipo ha saltado en tres jornadas desde la penúltima posición a la décimotercera. Un nueve de nueve puntos con un denominador común: los goles de Iban Salvador y el ‘Chicho’ Arango. El ecuatoguineano y el colombiano han marcado en los tres últimos tres partidos. SUPER los reunió ayer en la ciudad deportiva de Paterna. Los dos desbordan felicidad por sus rachas a nivel personal, pero sobre todo están alegres porque sus goles sirven para ayudar y hacer justicia con el equipo. Ambos coinciden. "Al final los goles son nuestros, pero el mérito es de todo el grupo".

Arango llegó procedente del Envigado FC este verano, aunque debutó una vez iniciada la temporada por motivos burocráticos. El delantero ha necesitado tiempo para adaptarse, pero ya lo ha hecho y lo está demostrando con goles. "Estoy contento y agradecido a Dios por esta racha de goles. A nosotros los delanteros nos toca finalizar, pero el mérito es de todo el equipo y de las indicaciones del míster". Arango ha llegado en calidad de cedido y espera que esta racha sirva para que el club haga efectiva su opción de compra. Lo tiene claro. Quiere quedarse. "He tenido que adaptarme, me pasó factura la expulsión en mi segundo partido, pero ahora estoy muy feliz. Espero darle más goles al equipo, no me conformo con los que llevo, porque quiero quedarme en España. Para él la clave del filial está en el cambio de mentalidad. El equipo ha cambiado la mentalidad. Se hacían bien las cosas, pero no teníamos resultados. Ahora hemos puesto más jerarquía y, aunque guste menos nuestro fútbol, tenemos resultados. Ahora no podemos relajarnos".

Igual de contento está Iban. "Estoy muy contento por los goles a nivel personal, pero sobre todo porque está ayudando al equipo a coger la dinámica que victorias que queríamos. Si los goles saben tres puntos siempre es mejor. Esta temporada me costó entrar en el once, pero con trabajo he conseguido estar ahí y ayudar al equipo", afirmó. El ecuatoguineano consideraba ilógica la situación del equipo en descenso. "Estábamos haciendo bien las cosas, pero los resultados no llegaban. Creo que las vacaciones de Navidad nos sentaron bien para desconectar, despejarnos un poco y darnos cuenta de la situación en la que estábamos.Creo que se ha empezado a hacer justicia al equipo. Sabía que con este equipo era ilógico estar en la posición en la que estábamos y eso nos ha dado fuerza para seguir adelante.Hemos confiado en nosotros mismos, sabíamos que con trabajo iban a llegar los resultados sobre todo en casa sonde no podíamos dejar escapar más puntos". Ellos son la cara de la reacción de un Mestalla que enseña el camino al primer equipo.

También te puede interesar:

La asignatura pendiente del 'proyecto Lim'