Solá, que ha ocupado varios puestos en la directiva del club y que ha sido vicepresidente, sustituye en la presidencia a Manuel Llorente, que abandonó hace poco más de un mes la presidencia de la entidad para acceder a la del Valencia CF.
El club, cuyas acciones pertenecen mayoritariamente a los hermanos y empresarios valencianos Juan y Fernando Roig, recuperará hasta que encuentre un nuevo patrocinador la denominación de Valencia Basket Club, nombre oficial de la entidad.
Además, el hasta ahora consejero Paco Raga, fue nombrado vicepresidente de la entidad y a partir de ahora asumirá la dirección general del club.
Todas estas decisiones se adoptaron en una reunión del consejo de administración de la entidad, tras la cual sus actuales miembros pusieron sus cargos a disposición de Solá, quien aseguró que lo resolverá "en la próxima junta".
"A partir de ahora Paco y yo ya estamos totalmente implicados en el nuevo ciclo que comienza", señaló Solá, quien explicó que esta nueva etapa estará marcada por la austeridad económica.
Solá pidió disculpas a la afición por el proceso de reflexión de cuatro semanas que desde la marcha de Llorente ha tenido el club y explicó los cuatro motivos que han llevado a la entidad a asumir estos cambios.
En primer lugar citó la insatisfacción que tenían por la gestión que se había desarrollado en el club y señaló que se había convertido en un "club de millonarios" en buena parte porque el apoyo económico de los Roig había llevado a pensar que contaban con un "presupuesto ilimitado".
En segundo lugar, culpó al nuevo modelo de Euroliga que se aprobará la próxima semana, que otorga licencias de participación casi definitivas a trece equipos, "lo que va totalmente en contra del principio de igualdad y contra el que seguiremos luchando.
En tercer lugar Solá citó la marcha de Manuel Llorente al Valencia CF y por último subrayó el momento de crisis económica por el que se atraviesa.
Aún así, Solá aseguró que los hermanos Roig han confirmado que al menos durante las dos próximas temporadas continuarán con el apoyo económico al club pero indicó que en este tiempo la entidad debe conseguir ser independiente económicamente respecto a sus máximos accionistas.
Solá será el quinto presidente del Valencia Basket
Vicente Solá (Llombay-Valencia, 1954), que el viernes fue nombrado presidente del Pamesa Valencia, será la quinta persona que ocupe este cargo en el club valenciano, desde que en 1986 se formó el club como heredero de la antigua sección de baloncesto del Valencia CF.
Solá ha estado ligado a la entidad desde su creación, de hecho entre 1982 y 1986 fue el delegado de la sección en el Valencia CF y cuando se produjo el descenso a Segunda División del club de fútbol le llevó a prescindir de sus secciones, él fue uno de los fundadores del Valencia Basket Club.
El primer presidente de la entidad fue el periodista Antonio Egea, pero Solá ya formaba parte de una directiva en la que hasta el pasado viernes, y con el formato de consejo de administración, era vicepresidente y una de las personas de confianza de los hermanos Juan y Fernando Roig, máximos accionistas de la entidad.
Cuando los hermanos Roig se unieron al proyecto pocos meses después de su formación, Fernando Roig, hoy presidente del Villarreal CF, fue nombrado presidente, cargo que ocupó casi trece años, hasta que en febrero de 1999 intercambió su posición con la de su hermano Juan, que hasta entonces había sido vicepresidente y que desde entonces y hasta 2007 fue su primer ejecutivo.
En febrero de ese año, tras destituir a Victor Sendra como director general del club, Juan Roig anunció que cedía la presidencia ejecutiva del club a Manuel Llorente a quien otorgó plenos poderes para dirigir el club, aunque tanto él como su hermano Fernando permanecieron como presidente y vicepresidente del consejo de administración de la entidad.
Solá tendrá la ayuda en a dirección del club de Paco Raga (Alfafar-Valencia, 1950), otro de los miembros de la directiva desde 1986, que fue nombrado vicepresidente y que asumirá la dirección general del club y se encargará fundamentalmente de su administración.
Vicente Solá será por tanto el quinto presidente que tenga el Pamesa, un club que ha cumplido recientemente veintitrés años, que tiene en sus vitrinas el título de la Copa del Rey de 1998 y el de la Copa ULEB de 2003.
Ahora se inicia ahora una nueva etapa marcada por dos cuestiones: la notable reducción de la aportación económica de los hermanos Roig, que sólo está asegurado las próximas dos temporadas, y la puesta a la venta del paquete accionarial que ambos poseen, que es el mayoritario en la entidad.
