No estaba muerto, estaba de parranda. Estamos ante una de esas historias que de vez en cuando se dan en el mundo. La familia de Mohammed al Gammal no podía creer lo que estaba pasando cuatro meses después de haber enterrado y llorado la muerte del exprofesor de 46 años. Las autoridades egipcias lo encontraron vagabundeando por el cementerio donde supuestamente había sido enterrado.

La familia identificó el cadáver de una persona como si de Mohammed al Gammal se tratara. Gammal, quien tenía esposa y varios hijos, padece una enfermedad mental que le hacía desaparecer durante semanas, afirma la prensa local egipcia. Fue en enero cuando su familia lo vio por última vez, hasta que recibieron una llamada del hospital diciendo que había llegado un cadáver no identificado.

Varios familiares acudieron al hospital para identificarlo y todos excepto una de sus hermanas confirmaron la identidad. Aseguran que también se le realizaron pruebas de ADN, pero los resultados nunca llegaron, así que a finales de marzo enterraron a la persona equivocada. Cuando finalmente llevaron a Gammal a su casa no daban crédito de lo sucedido. Es momento de pensar si realmente lo que vieron fue lo que quisieron ver.