Es evidente que la hija y la nieta de Rocío Jurado no se llevan bien. Y desde hace una década. Rocío Carrasco acusa a Antonio David de malmeter a su hija para volverla en contra de ella, vamos, de lo que se llama violencia vicaria.

Debemos remontarnos a julio de 2012, cuando la niña tenía sólo 15 años. Según contó Rociito, ocurrió lo siguiente: "Ese día Rocío me agrede y yo termino en un hospital. Es algo que se sabe, que se ha sabido públicamente, pero yo quiero decir una cosa: Rocío llega a ser verdugo porque antes ha sido víctima, ¿vale? Ha sido víctima e incluso más vulnerable que yo".

La versión de Rocío Flores

“Sostiene el atestado inicial que en la mañana del día 27 de julio de 2012, Rocío Carrasco Mohedano comenzó a discutir y a insultar a su hija de 15 años, Rocío Flores, cuando esta iba a ir al colegio, agarrándola del pelo, llevándola a la cocina y arrastrándola por el suelo, y una vez allí la agarró del cuello y comenzó a amenazarla de muerte, cayendo al suelo, propinando posteriormente diversas patadas a su hija menor”, denunció Rocío Flores a las autoridades nada más producirse el suceso.

La hija de Rocío y Antonio David cambió parcialmente su versión: “En su exploración realizada en sede judicial, la menor modificó su versión inicial de los hechos y relató que fue a desayunar a la cocina, que ambas discutieron por una pieza de fruta y que ambas comenzaron a forcejear, señalando que su madre ‘le restregó una nectarina por encima’, hecho que ni siquiera refirió en su declaración inicial. Así mismo señala que su madre la tiró del suelo y la amenazó, pero no relata que la llevara hasta allí cogiéndola del pelo”. Las contradicciones hicieron que la investigación se posicionara del lado de su madre, por lo que la niña que entonces contaba sólo con 15 años fue declarada culpable de agresión.