¿Por qué las bandejas de carne de supermercado naturalmente llevan una almohadilla absorbente?

A diferencia de cuando la compras en una carnicería, cuando viene envasada trae este sorprendente añadido

Todas las semanas, al menos una vez, toca hacer una excursión para comprar comida. Salvo en dietas vegetarianas y veganas es seguro que te llevarás más de una bandeja de carne. Pollo, pavo, cerdo, ternera, cordero... cualquier supermercado nacional ofrecen una enorme variedad de posibilidades.

Cada carne es muy difícil entre sí, pero compres lo que compres hay algo seguro. En la parte inferior de la bandeja hay una almohadilla absorbente que te habrá llamado la atención más de una vez. Sin embargo, si vas a la carnicería te envuelven el pedido sin incluirla. ¿Por qué? ¿Cuál es la diferencia?

El motivo por el que las bandejas de carne de supermercado llevan almohadillas absorbentes

Imagen del interior de un supermercado Consum

Imagen del interior de un supermercado / Consum

Da igual que vayas a Consum, Carrefour, El Corte Inglés, Aldi, Lidl... es un rasgo en común. Los envases traen esa especie de toallita que sirve para absorber el líquido que va soltando la carne con los días. De hecho, si te fijas verás que está empapada. Esta función hace que sea todo más limpio y no lo pringues todo al abrir y cocinar. Sin embargo, los paquetes de carnicería pueden llegar a chorrear si no los abres con cuidado.

Pero hay más. Lo verdaderamente importante de la almohadilla es absorber las bacterias que puede contener la carne. Cuando está cruda pueden acumularse si hay líquido, por lo que es imprescindible absorberlo. De hecho nunca toquetees la toallita, porque tendrá esas bacterias dentro.

Los curiosos materiales de esas 'toallitas'

Para acabar con la curiosidad, te contamos de qué están hechas y cómo llegan a ser tan absorbentes. Pues bien, normalmente se trata de gel de sílice o celulosa recubierto con plástico perforado. Todo ello a base de materiales no tóxicos que pueden entrar en contacto con la comida, evidentemente. Con una pequeña almohadilla se puede absorber nada menos que 40 gramos de esos líquidos que suelta la carne. Nunca te acostarás sin saber algo nuevo.