Lograr la paz social en el entorno del Elche y lograr salir del proceso concursal en el que se encuentra la entidad son los dos principales objetivos que se ha marcado a corto plano el nuevo consejo de administración de la entidad, elegido por los accionistas este viernes.

El nuevo órgano rector del club elegirá sus cargos el próximo lunes, tras una reunión entre sus miembros en el estadio Martínez Valero, aunque todo apunta a que Juan Serrano, hasta ahora represente institucional y portavoz de la junta gestora, pasará a desempeñar el cargo de presidente.

Serrano, quien ya fue máximo dirigente del club en la temporada 2002-03, se ha marcado como reto personal alcanzar la paz social en el entorno del Elche, muy dividido y crispado en los últimos meses, para darle estabilidad a un equipo completamente nuevo.

El futuro consejo, formado por el grupo de empresarios que tuteló la transición del club desde la dimisión de Juan Anguix, anterior presidente, en julio hasta la junta extraordinaria de accionistas, no tendrá fácil reconquistar la confianza de la afición, que ve en este órgano rector cierto continuismo con el pasado.

De hecho, el nuevo consejo fue votado por el ex presidente José Sepulcre y cuenta en su equipo de trabajo con dos consejeros de aquella etapa, como Jaime Oliver y Francisco Sánchez.

El otro reto prioritario de nuevo órgano de gestión es lograr salir del concurso de acreedores antes de que finalice la temporada. El nuevo consejo acelerará los contactos con los principales acreedores para alcanzar un acuerdo y pactar un calendario de pagos.

Para el Elche, según explicó a Efe César Nohales, coordinador de la gestora y futuro consejero, es vital salir del concurso en el plazo de un año, ya que de lo contrario no podrá recibir algunos ingresos económicos pendientes muy importantes por parte de la Liga de Fútbol Profesional (LFP).

"Creemos que el Elche es viable si podemos cumplir con estos plazos y salir del concurso", aseguró Nohales, quien a nivel profesional desempeña a un cargo en la dirección de una de las empresas máximas acreedoras del Elche, ya que se encargó de la reforma del estadio.

"Hay clubes a las que quedarse varios años protegidos por el concurso les puede salir bien y ser una ayuda, pero nosotros tenemos mucho que perder si se alarga este proceso", concluyó.