Se acabó la espera y llegó uno de los días más importantes en la historia reciente del Villarreal. Esta tarde el Submarino arranca una mini Liga de seis partidos. El premio no es moco de pavo, puesto que en juego está la permanencia en la Primera División. Los amarillos tienen ante sí una oportunidad perfecta para disipar las nubes del descenso de La Cerámica. La mejoría en el juego del equipo y, sobre todo, la victoria en Montilivi dibujan un contexto excelente para sumar los tres puntos ante el CD Leganés. Asimismo el equipo tendrá la tranquilidad de conocer la derrota gerundense, el resultado del Ciutat y los empates de Rayo, Huesca y Valladolid, que marca el descenso y puede quedarse a cuatro puntos. Y lo hará presumiblemente en un magnífico ambiente en el estadio.
El club ha apostado por movilizar a la afición grogueta con varias iniciativas para incentivar la afluencia a feudo amarillo. La Cerámica es una de las chinas en el zapato del Villarreal. El público del Submarino tan solo ha celebrado tres victorias como locales. Una cifra ínfima para cerrar la salvación, así como una asignatura pendiente que arrastra desde la 2017/18. El equipo es consciente de la necesidad de tapar las fugas en Vila-real, ya que con los partidos que restan en casa puede valerle para alcanzar el objetivo.
El Villarreal tendrá delante a un equipo complicado, pero al que le tiene tomada la medida. Bacca, que descansó en Europa y puede ser de la partida, le ha hecho gol a los blanquiazules en los últimos dos enfrentamientos.
El 4-2-3-1 le está yendo bien al equipo. Calleja ha logrado así el ansiado equilibrio entre el ataque y la defensa. Ese sistema obligará a mantener a Ekambi en la banda izquierda, para tal y como relató el técnico en la previa hacer daño con sus diagonales y el uno contra uno ante una zaga superpoblada con cinco futbolistas. De hecho el Leganés es el quinto equipo menos goleado solo por detrás de Getafe, Valencia, Barcelona y Atlético.
En la medular regresarán Cazorla e Iborra, piezas fundamentales para Calleja. Junto a ellos actuará en el enganche un Fornals con mucha más chispa en las últimas semanas. Él le sirvió el 0-1 a Chukwueze en Montilivi. El joven nigeriano actuará en el otro costado con el mismo cometido que Ekambi. En la zaga vuelve la defensa de cuatro, aunque pese a la vuelta de Jaume Costa tras la lesión, Quintillá ocupará el lateral izquierdo.
Como un 'pepino'
Con la permanencia virtual un año más desde hace un par de jornadas, el Leganés llega sin complejos al duelo de esta tarde. Pellegrino y los suyos enlazan cuatro partidos sin perder. El último fue ante un Real Madrid que no pudo pasar del empate en Butarque. Incluso todavía no han apagado la llama europea, aunque lejana las cuentas les salen a los pepineros.
Pellegrino tan solo tiene las bajas del argentino Szymanovski y de Recio. Mikel Vesga por una molestias musculares y Michael Santos tras superar un proceso vírico serán dudas hasta última hora. Dicho lo cual el único cambio en el esquema habitual será la entrada de Rodri Tarín en el centro de la defensa por Omeruo. Por delante regresa a la titularidad En-Nesyri en detrimento de Carillo, mientras que Óscar lo haría si Vesga no llega al duelo.
