Tragedia en Indonesia: más de 100 muertos en un estadio

Miles de aficionados saltaron al césped tras el partido entre el Arema y el Persebaya. Se habían vendido 4.000 entradas de más

Al menos 174 personas han fallecido durante los incidentes

Al menos 174 personas han fallecido durante los incidentes / EFE

EFE

Al menos 174 personas, incluidos dos policías, murieron y casi 200 resultaron heridas en un brote de violencia tras un partido de fútbol, cuando los hinchas saltaron al campo porque su equipo había perdido, en la isla indonesia de Java, informaron este domingo fuentes policiales.

La Policía, que usó gases lacrimógenos, indicó que los disturbios ocurrieron la noche del sábado en el estadio Kanjuruhan de la ciudad de Malang, en la provincia de Java Oriental, en un partido en el que el Arema fue derrotado 2-3 por el Persebaya Surabaya.

Según explicó en una rueda de prensa el jefe de policía de Java Oriental, Nico Afinta, 34 personas perdieron la vida en el interior del estadio, mientras que las demás fallecieron en el hospital.

Cerca de otras 180 personas resultaron heridas y se encuentran bajo tratamiento médico en varios hospitales de la región, con diferentes niveles de heridas.

El aforo se excedió en 4.000 espectadores

Según ha informado Mohammad Mahfud Mahmodin, ministro de Asuntos Políticos, Jurídicos y de Seguridad, el aforo del estadio se sobrepasó por 4.000 espectadores. El máximo permitido es de 38.000 y se vendieron 42.000 entradas. Además, la Policía quería que el partido se jugase por la tarde por ser de alto riesgo y a pesar de ello se disputó de noche.

La mayor parte de las muertes se produjo a raíz de la estampida de los aficionados, cuando decenas de ellos se asfixiaron, ya que se trataba de "un espacio lleno de gente, que provocó dificultad para respirar (y) falta de oxígeno", señaló el comisario.

Tras la tragedia, el presidente indonesio, Joko Widodo, expresó "sus más sentidas condolencias" y anunció que ha solicitado "una evaluación exhaustiva de la ejecución de los partidos de fútbol" y de "los procedimientos de seguridad para su celebración", así como una investigación para "averiguar a fondo" los sucesos en Malang.

"Le pedí al ministro de Salud y al gobernador de Java Oriental que supervisen los servicios médicos especiales para las víctimas que están siendo tratadas en hospitales para que tengan el mejor servicio", agregó el mandatario en un discurso televisado.

Miles de aficionados saltaron al campo

La espiral de violencia empezó cuando unos 3.000 hinchas del equipo perdedor irrumpieron en la cancha y empezaron a atacar a los jugadores, lo que desató un duro enfrentamiento con las fuerzas de seguridad, que utilizaron gases lacrimógenos en un intento de frenar los ataques.

El uso de esos gases por la Policía fue criticado por algunas entidades internacionales, como Amnistía Internacional, que urgió a las autoridades indonesias a llevar a cabo una "investigación rápida, exhaustiva e independiente sobre el uso de gases lacrimógenos en el estadio".

La organización enfatizó que el "gas lacrimógeno nunca debe ser disparado en espacios confinados" debido a su alto nivel de peligrosidad y recordó que las normas de seguridad de los estadios de la FIFA prohíben el transporte o el uso de los llamados "gas de control de multitudes".

"El gas lacrimógeno solo debe usarse para dispersar multitudes cuando se ha producido una violencia generalizada y cuando otros métodos hayan fallado. Se debe advertir a la gente que se usará gas lacrimógeno y permitir que se disperse", expresó en nota el director ejecutivo de Amnistía Internacional Indonesia, Usman Hamid.

Tras el "consternador" incidente, la Liga de fútbol del país suspendió todos los partidos durante una semana, en tanto que la Asociación de Fútbol (PSSI) anunció la apertura de una investigación para averiguar los hechos.

Las reacciones no han tardado en aparecer. LaLiga ha anunciado que habrá un minuto de silencio en todos los partidos de este domingo en memoria de las víctimas. El Valencia CF es uno de los clubes que han trasladado sus condolencias.

La tragedia ya es considerada una de las más mortales en la historia del fútbol mundial.