Luis Rubiales ha llegado este mediodía a la Audiencia Nacional para declarar por el beso a Jenni Hermoso durante la celebración del reciente Mundial de Australia y Nueva Zelanda. El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), que no ha atendido a los medios de comunicación, podría enfrentarse a cuatro años de cárcel por dos delitos: uno de agresión sexual y otro de coacciones.