El Barcelona rompe la tradición: un once sin catalanes

En el reciente enfrentamiento contra el Oporto, el Barcelona presentó un once inicial sin jugadores catalanes, marcando una peculiaridad que no ocurría desde hace más de dos décadas. La última vez que se dio esta situación en la Champions League fue el 23 de abril de 2002, en una semifinal ante el Real Madrid, donde los blancos se llevaron a victoria por 0-2 en el Camp Nou.

Este fenómeno inusual se evidenció con el once conformado por Iñaki Peña, Araujo, Koundé, Íñigo Martínez, Cancelo; Pedri, Frenkie De Jong, Gündogan; Raphinha, Lewandowski y Joao Félix. Aunque el equipo aseguró su pase a los octavos de la Champions, esta alineación despierta diversas interpretaciones.

La ausencia de jugadores formados en la Masía entre los jugadores de campo destaca, siendo el portero Iñaki Peña el representante de las categorías inferiores del club. El técnico Xavi a pesar de contar con cinco canteranos en la plantilla, optó por la veteranía en este encuentro.

Asimismo, la particularidad más llamativa es la falta de jugadores catalanes en el once inicial. Ninguno de los titulares frente al Oporto nació en Catalunya, algo que no sucedía desde aquel partido de Champions League hace 21 años. Un hecho que resalta la diversidad geográfica el equipo y marca un contraste con la tradición catalana que ha caracterizado al Barcelona a lo largo de su historia.