Cualquier sufrimiento es poco para mantener el liderato, aunque a este paso se deberán repartir polipíldoras contra infartos a las puertas de Mestalla. Entre otras cosas porque el Athletic estaba muy espeso y entregado, pero por aquellos misterios indescifrables somos capaces de resucitar a un muerto en la segunda parte; menos mal que apareció entonces el latigazo de Vicente, que si no ahora estaríamos en la más absoluta de las depresiones. Hay que pulir algunos aspectos y este parón de dos semanas va a venir muy bien, pensando ya en la visita al Camp Nou, un escenario único para confirmar que este Valencia va muy en serio y dejar claro que la pareja Aduriz-Soldado es muy efectiva. Una vez más quedó claro el sábado que no sólo pueden jugar juntos, sino que lo deben hacer a menudo. Aunque cuando lo hagan habrá que inventarse un centro del campo que no esté tan lejos de los dos delanteros y que les provea de más balones, en compañía de los extremos.

¿Modernidad?

Algunos disfrutan con las rotaciones, para gustos colores, pero deberían sacarse también el abono en La Fonteta. El baloncesto es la expresión máxima de esa milonga futbolera, pues en la cancha puedes rotar, alternar, turnar y hasta rodar todo un banquillo, eso sí deja contentos a todos. Cierto que ahora hay muchos más partidos que cuando nos sabíamos la alienación de memoria, pero también más vitaminas, fisios y magos como el doctor Candel. Un equipo siempre tiene titulares y suplentes, con jugadores con un rol más importante que otros, y salvo lesión o bajón destacado el puesto nunca ha sido una rifa de feria. Además esa regularidad es la base del éxito, sobre todo en Liga.

Sin triple A

Como todavía no se rota en la portería —en balonmano hasta puede salir uno sólo para cuando hay un penalti, pero no demos ideas— es importante mantener la pareja de centrales. Se necesitan muchos minutos para que se compenetren, para saber con un gesto quién debe hacer la cobertura y quién permanecer en el área. La columna vertebral de un equipo es el portero, el central, el mediocentro y la mediapunta. Eso garantiza muchos goles y si no recordemos al goleador Mista cuando Cañizares, Ayala, Albelda y Aimar.