Creo que el valencianismo tiene hoy la sensación de que a su equipo se le escaparon dos puntos en el Camp Nou, no puede haber mejor sensación que esa porque al Valencia CF le faltó muy poco para llevarse la victoria. La quiso y la buscó, lo mismo que el otro día la remontada en la Copa. A ese muy poco se le pueden poner algunos nombres, Marcelino habla de suerte, aunque también se puede decir Gameiro, que lo estaba haciendo muy bien hasta el momento en que se tuvo que ir. O Gayà. O quizá Guedes, tenerlo al menos en esos quince minutos finales habría sido decisivo... La cuestión es que el Barça, que llevaba ocho victorias seguidas en esta Liga, lo tuvo muy crudo para retener ese empate, aprovechando los pocos errores atrás que cometieron los de Marcelino porque, al final, un equipo que tiene lo que tiene arriba acaba creando sus ocasiones.

Para el Valencia en lo que respecta a la clasificación en uno de los escenarios más exigentes, está creciendo en todos los sentidos, suma de nuevo a Kondogbia y pronto será el momento del portugués.. Y despeja alguna duda que pudiera quedar todavía: estos jugadores quieren la Copa, eso es evidente, pero aquí nadie está por la labor de dejar a un lado los objetivos en LaLiga.

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