Haciendo un ejercicio de política, los políticos podrían hacer un poco de análisis y ver hasta qué punto sus declaraciones públicas pueden ayudar o no a que las cosas funcionen. En este caso el proyecto del Nou Mestalla. Vamos, que el alcalde y los concejales/as, antes de hablar de cosas del Valencia CF por muy importantes que sean para la ciudad (todo lo que haga o deje de hacer el club es importante para la ciudad, no solo el estadio) podrían plantearse si es positivo para el buen fin de la operación meter más presión en estos días de debilidad, en un mal momento deportivo que pasa factura a los responsables del club en forma de críticas despiadadas, en medio de una crisis económica que ya sabemos las consecuencias que va a tener para todos.

En fin, que en clave política igual es rentable sumarse a la ola socialmediática para contentar a votantes potenciales, pero al Valencia CF y a la ejecución de la obra todo esto no le va a beneficiar en nada. Una obra que todos sabemos el tiempo que lleva parada y por qué, a la que en todos esos años nadie ha encontrado una solución que se pueda considerar decente y legal, porque de las otras sí las hubo. Pregunten a los expertos en delitos económicos de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil por el triángulo Rodrigo Rato.

Sabemos que Meriton se comprometió a terminar el estadio y completar la operación del actual Mestalla. Hay que exigirle que lo haga, lo hacemos día sí y día también, aunque un poco de perspectiva sobre todo desde la administración no estaría de más. El Valencia CF era hasta hace unos pocos años un problemón para los valencianos, debía dinero al Instituto Valenciano de Finanzas, no pagaba la deuda con la caja de ahorros valenciana ni tampoco pagaba al ayuntamiento por los terrenos de la permuta. Una ruina. Hasta los bedeles del Consistorio se sorprendieron el día en que vieron a alguien del Valencia CF entrar con la intención de pagar, y ese alguien era Meriton. Peter Lim podría haber invertido en estos cinco años para acabar el estadio, pero ha preferido hacerlo en futbolistas. Otra cosa es que lo haya hecho mal, aunque recordarán en el ayuntamiento que son los jugadores con los que salieron en la foto hace un año y pico, cuando fueron a llevarles la Copa del Rey.

Aunque, de todo lo leído y escuchado recientemente, lo que más sorprende son unas palabras del alcalde de la ciudad en las que viene a referirse a Peter Lim como «he querido decirle a este señor que vive en Singapur...». Hombre, señor Ribó, que es usted el alcalde de València, no un tuitero forofo. A una persona tan abierta y tolerante como usted le queda muy mal expresarse en público así. Seguro que fue un descuido.