Entrevista | Luis García Plaza Entrenador del Deportivo Alavés

“Todos pensamos que el Levante es el principal candidato para subir a Primera División”

El técnico del Alavés, rival directo por jugar el año que viene en la élite, cuenta las horas para afrontar un encuentro «especial» y en el que quiere conseguir los tres puntos. Sin embargo, tiene claro cuál es su preferencia: «Firmo que asciendan los dos»

Luis García Plaza, entrenador del Deportivo Alavés firmaría que granotas y babazorros se repartieran las dos plazas de ascenso directo

Luis García Plaza, entrenador del Deportivo Alavés firmaría que granotas y babazorros se repartieran las dos plazas de ascenso directo / Imanol Lavado | Deportivo Alavés

Rafa Esteve

Rafa Esteve

Feliz con su nueva etapa en un banquillo, y encantado con la ciudad de Vitoria, Luis García Plaza pugna por ascender con el Alavés a la élite del fútbol español sin pensar en el futuro y viviendo el presente. Su preocupación a corto plazo es la de revertir dos derrotas consecutivas ante un Levante que respeta, pero que le transmite un sinfín de emociones en el plano sentimental.

¿Qué tal?

Bien, aunque hace dos partidos estaba mejor ya que solo habíamos perdido uno (ríe). Pero en definitiva estoy bien. Estamos acostumbrados a vivir con victorias y con derrotas. Estoy muy a gusto en Vitoria. Pasando más frío que en otros sitios, pero es una ciudad maravillosa y estoy encantado.

Luis García Plaza ya ha descubierto el frío de Vitoria

Luis García Plaza ya ha descubierto el frío de Vitoria / Imanol Lavado | Deportivo Alavés

Dos partidos perdidos han desinflado al Alavés, pero qué gran temporada está haciendo.

Eso es lo que le he dicho a los jugadores. Si alguien que no esté pendiente de la Segunda División coge la clasificación hablaría de lo bien que está el Alavés. No obstante, si se fijase solamente en el último partido pensaría que es un equipo malo. No va relacionada una cosa con otra. Durante el año se viven momentos mejores y peores, y pienso que tampoco era normal que el Alavés fuese un líder destacado porque está todo muy igualado. Ahora han caído dos derrotas y lo que tenemos que hacer es preparar el partido contra el Levante al máximo, a ver si lo ganamos.

¿Prevé una liga igualada?

Va a haber mucha igualdad entre muchos equipos. Los que mantengan una regularidad de puntuación van a ser los que van a llegar con opciones al final. Entre el primero y el sexto hay cuatro puntos. Eso es una auténtica locura. Vamos a ver cómo evoluciona, cómo seguimos, la progresión de los equipos, si hay lesiones... Muchas cosas pueden influir en tener dos, tres o cuatro puntos más que el resto. Eso marcará el ascenso a Primera. Puede subir cualquiera. El Burgos, por ejemplo, ahí está. Ninguno contaba con ellos y se lo están ganando.

Luis García Plaza espera mucha igualdad en la lucha por el ascenso a Primera

Luis García Plaza espera mucha igualdad en la lucha por el ascenso a Primera / Imanol Lavado | Deportivo Alavés

¿Cómo afronta este desafío tras su paso por el Mallorca? ¿Busca formar un proyecto a largo plazo en Mendizorroza?

Los entrenadores tenemos que vivir más al día. Es muy difícil estar mucho tiempo en los sitios. No solo yo, sino cualquier persona. No es nada fácil. En Mallorca, después de ascender, solo estuve una jornada en descenso. Y la primera vez que estuve en descenso me cesaron. Sabía que ese año iba a ser de sufrir mucho, pero ellos prefirieron cambiar. Hay que respetarlo, no puedes hacer nada. Cuando no dependen de ti las cosas hay otras personas que toman decisiones y ya está. No obstante, fui muy feliz en esos dos años. Vivimos un ascenso muy bueno. El equipo, hasta que entró en descenso, estaba más o menos colocado para lo que tenía que estar. Pero, ahora, lo que tienes que hacer es entrenar. Aquí estamos felices e intentando estar arriba. Ojalá podamos ascender, pero no piensas en hacer un proyecto porque, cuando piensas eso, después te echan en un segundo y se acaba todo. Lo que hay que hacer es ver el presente y mirar hasta dónde podemos llegar.

¿No piensa a largo plazo?

Cuando vas a un club, siempre tienes que pensar que estarás para toda la vida. Tu forma de trabajar tiene que ser esa. Pero después tienes que enfrentarte al día a día porque a los entrenadores nos mantienen los resultados. Ya puedes ser buena persona y trabajar al máximo, que como no ganes... Y a veces incluso ganando con resultados más o menos coherentes, porque piensan que tienes que estar más arriba. Los entrenadores somos el punto más fuerte en algunas cosas y el más débil en otras. Hay que ir día a día, buscar el partido a partido y sacar el máximo rendimiento a tu equipo porque no puedes mirar más allá.

¿La presión entre salvarse en Primera y ascender es la misma?

Igual. Todos los entrenadores tenemos mucha presión, sea cual sea el objetivo y sea la categoría que sea. Si bajas de Primera División es una ruina para el equipo y si no subes también es un palo muy gordo. Las presiones son muy altas siempre y tenemos que saber llevarlas, manejarlas y, sobre todo, mantenerte estable según vayan pasando las jornadas.

¿Con qué se queda? ¿Un ascenso o una permanencia?

Me quedo con un ascenso. Un ascenso es como ganar un título. Una permanencia es un sufrimiento durante todo el año. Pierdes muchas más veces de las que ganas. La recompensa final es solo cuando consigues el objetivo. Y a veces, lo consigues sobrado y no se valora. Durante mi etapa en el Getafe quedamos décimos y duodécimos y parecía que no habíamos hecho nada. Sin embargo, cuando logras una salvación en el último partido se celebra como si fuera una fiesta. Un ascenso, para mí, es una acumulación de muchos partidos ganados, donde el equipo y la afición disfrutan. Por eso lo veo como si se tratase de un título.

Entre una permanencia y un ascenso, Luis García Plaza se queda con lo segundo

Entre una permanencia y un ascenso, Luis García Plaza se queda con lo segundo / Imanol Lavado | Deportivo Alavés

Y en plena vorágine competitiva, enfrentamiento especial...

Sin duda... Siempre que me enfrento al Levante es especial. Ahora, con el aliciente de que tenemos el mismo objetivo y peleamos por estar arriba. Un Levante que empezó mal y que ahora está bien, hasta el punto de que lleva diez partidos sin perder. Es una racha muy buena.

¿Qué significa el Levante para usted en lo personal?

Para mí el Levante es muy especial. Significa un club donde fui muy feliz y donde cumplimos varios objetivos. Fueron temporadas intensas, muy bonitas y siempre lo he dicho: es un equipo que quiero mucho y que llevo en el corazón. Ojalá ascendamos Levante y nosotros, es lo que quiero y lo que deseo. Menos el lunes, espero que les vaya bien el resto de la temporada.

¿Cómo definiría cada una de sus temporadas en Orriols?

El primer año era poder competir. Poder hacer un equipo. Todo por el momento por el que pasaba el club, uno de los peores de su historia al quedarse a punto de la liquidación. Partíamos con la idea de no pasar apuros y salió todo bien. Hubo un momento duro donde estuvimos cerca del descenso pero subimos hacia arriba. El segundo año, el del centenario, lo afrontamos muy ilusionados. No teníamos el objetivo de ascender, pero sabíamos que había un muy buen bloque y que, si todo iba bien, íbamos a estar en la pelea. Hicimos una segunda vuelta espectacular. Y el tercer año, después de una primera vuelta muy difícil, y con un presupuesto realmente ridículo, se hizo una piña y se realizó una segunda vuelta increíble, sumando treinta puntos. Esa cantidad, en una segunda vuelta y en Primera División... Fue algo muy complicado. Nadie se acuerda, pero tuvimos que hacer 45 puntos para salvarnos. Además, se hizo muy buen trabajo a la hora de traer jugadores, de fichar con poco. Cuando volví al estadio con el Mallorca me sorprendió el cambio que había dado. Nunca se me olvidará.

¿Con qué momento se queda de los que vivió en el Ciutat?

El día del ascenso. Aquel año viví momentos inolvidables, pero me quedo con ese. Es el que más recuerdas por ver a la gente invadir el campo y por la fiesta que se vivió. La salvación también porque fue en Mestalla, pero me quedo con el partido contra el Castellón.

Luis García Plaza guarda muchos recuerdos de Orriols y si ha de elegir uno se queda con el partido del ascenso ante el Castellón

Luis García Plaza guarda muchos recuerdos de Orriols y si ha de elegir uno se queda con el partido del ascenso ante el Castellón / Imanol Lavado | Deportivo Alavés

En esa época militó en el Levante un Vicente Iborra que volvió el pasado verano. ¿Qué relación tiene con él?

Tengo una relación de cariño. Hace poco me felicitó por mi cumpleaños. Vicente es un líder. Es un chico que allá donde va le hacen capitán. No solo en el Levante, sino también en el Sevilla y en el Villarreal. Le hacen parte del grupo importante de jugadores dentro de un vestuario por todo lo que representa. Es un profesional excelente y un líder. Él estaba conmigo de delantero y le bajamos al centro del campo porque le vimos facultades. Ha desarrollado gran parte de su carrera ahí. Le tengo mucho respeto y sé que es un líder en el vestuario del Levante. Para mí es jugador de Primera División.

¿Cómo se le ve al Levante actual desde fuera de València?

Todos pensamos que es el principal candidato a ascender. Contra nosotros jugará con dos bajas en la delantera como son Soldado y Wesley Moraes, y todavía les queda Bouldini. Eso no lo puede decir ningún equipo de la categoría. Si analizas su once y el nuestro son parecidos, pero en profundidad de plantilla, como la del Levante... ninguna. Por eso es el principal candidato a ascender. Y no es que lo diga yo, es una sensación que tienen todos los entrenadores de la categoría. Todo el mundo que se dedica al fútbol lo piensa. Hay muy buenos onces en Segunda División, pero en la longitud, y en la calidad de la plantilla, es la mejor. Tenemos que reconocerlo y hay que luchar contra ello.

¿Lo ve ascendiendo a la élite?

Sí, lo que pasa es que en el fútbol eso no significa que vayas a ascender, pero es el que más tiene en cuanto a recursos. Sobre todo por el número de jugadores. Nosotros contamos con 19 profesionales y muchos vienen del filial en Tercera División. El Levante tiene la plantilla más amplia e importante.

¿Tuvo la opción de volver al Levante el pasado verano?

Contactos no hubo. Si estuve en la lista de Felipe Miñambres es una pregunta para Felipe. Firmé al día siguiente de que el Alavés descendiera. No esperamos nada. Fue así.

¿Y qué relación tiene con Javi Calleja? Comparten lazos.

Me llevo bien con Javi Calleja, sobre todo porque tiene un preparador que se llama José que trabajó cuatro años conmigo. Fue mi preparador físico en el Benidorm y luego en el Getafe. Calleja tiene a Luismi Loro, al que yo entrené en el Benidorm. Su entrenador de porteros trabajó conmigo en el Villarreal. Tenemos mucha relación, lazos en común y situaciones que nos unen. Nos tenemos mucho respeto. Si por mí fuera, que pierdan el lunes y que suban al final los dos. Así lo quiero y así lo deseo.

El destino ha sido caprichoso uniendo a Luis García Plaza, Javi Calleja y Paco López en la lucha por el ascenso

El destino ha sido caprichoso uniendo a Luis García Plaza, Javi Calleja y Paco López en la lucha por el ascenso / Imanol Lavado | Deportivo Alavés

Y, entre medias, Paco López también pelea por ascender.

Paco fue compañero mío en el Benidorm y entrenador del Levante. Ahora estamos los tres en los tres descendidos de Primera División. No sé si llamarlo Triángulo de las Bermudas o Triángulo del Levante (ríe).

¿Qué diferencias hay entre el Luis García del Levante al del Alavés?

En la esencia hay pocas diferencias. Cada uno es como es. La vida te hace cambiar porque vas cumpliendo edad, tienes gustos diferentes y vives situaciones diferentes. Pero mi esencia es la misma. El Luis García pasional, el Luis García al que le gusta lo que hace, que hace su trabajo... La diferencia es que me he tenido que adaptar a las nuevas tecnologías. Cuando empecé tenía un segundo entrenador y un preparador físico. Como mucho, un preparador de porteros. Ahora somos ocho o nueve en un mismo cuerpo técnico. Tienes que ir adaptándote y evolucionando. Si no, no tienes nada que hacer. Ahora salen entrenadores mucho más preparados y dominando muchas más áreas. Por otra parte, también creo que la experiencia es un grado. A la hora de manejar un vestuario, de manejar personalidades, de expresar lo que quieres... En eso me siento mejor y soy mejor entrenador. Pero a nivel personal soy igual.

Según ha dejado entrever en esta entrevista, firma un ascenso de Levante y Alavés. ¿Es así?

Sí, sí. Sin dudarlo. Respetando a mi amigo Paco López y al Granada, a Las Palmas, otro candidato tremendo, al Eibar... lo firmo de cabeza. Hay que ser muy agradecido con los equipos donde has entrenado. Equipos que, encima de entrenar, te han marcado. Quitando los dos partidos que juegue contra ellos les deseo lo mejor. Y si me pones delante un papel y puedo firmar que subimos los dos, lo firmo.