Los esprínters vuelven a cobrar protagonismo en la etapa de mañana, una larga jornada de 228,5 kilómetros entre Cagnes-sur-Mer y Marsella, con tres cotas de cuarta categoría y una de tercera pero que parece prometida a una llegada masiva.

Tras las escarpadas jornadas de Córcega y la contrarreloj por equipos de Niza, con la general muy apretada, todo parece apuntar que el pelotón recobrará algo de calma y que los equipos de los llegadores intentarán imponer su ley.

Se trata de la primera de las tres etapas de transición que llevarán la carrera hasta las faldas de los Pirineos, primera cita con la montaña en el centésimo Tour.

La etapa se desarrollará por el interior, pero muy cerca del mar y las cotas puntuables no son demasiado peligrosas.

- Etapa 5: Cagnes-sur-Mer - Marsella, 228,5 kilómetros

Salida: 12.00 horas (10.00 GMT)

Llegada prevista: 17.11 (15.11)