El ámbito profesional del raspall anda convulsionado desde que A Mà Pilota, entidad cuya cabeza visible es la del pelotari Waldo, anunció su intención de aglutinar a los jugadores de la modalidad para gestionar sus agendas a cambio de una compensación económica.

El proyecto ha generado división desde que fue hecho público. Y ayer, los trinqueters de los recintos de La Llosa de Ranes, Oliva, Genovés, Villanueva de Castellón, Bellreguard, Alzira, Guadassuar y Xeraco mostraron su oposición públicamente a través de un comunicado.

En dicha misiva los gestores de estos recintos señalan su rechazo a una iniciativa que, "lejos de aunar y mirar por el interés común, solamente beneficia a unos pocos, especialmente a los propios gestores de A Mà Pilota", señalan. Tampoco ha satisfecho la propuesta de Waldo, ya que según expresa el comunicado, "se nos plantean unas cifras inasumibles. Hemos llegado a la conclusión de que A Mà Pilota no tiene por objetivo unificar al raspall sino estrangular económicamente a los trinquetes para hacerse cargo de su gestión".

En otro extracto del escrito, los trinqueters también se muestran contrarios con las maneras en las que se ha ofertado el proyecto: "rechazamos las formas utilizadas tanto para convencer a los pelotaris como a los trinqueters. Nos consta que varios de los pelotaris que se han comprometido con A Mà Pilota lo han hecho por miedo a quedar excluidos de la actividad profesional y no porque las condiciones les parezcan satisfactorias", dicen.

Y para concluir, los trinqueters lanzan un mensaje a sus afines: "estaremos al lado de los jugadores que rechacen este proyecto".