El Levante UD FS cosechó una derrota frente al Fútbol Emotion Zaragoza (3-1) en el Pabellón Siglo XXI que frena la racha de los granotas tras su última victoria en Paterna frente a Segovia. El conjunto aragonés se mostró muy superior en un primer tiempo en el que los azulgranas no se encontraron y el rival aprovechó para golpear hasta en tres ocasiones. Tras el descanso, los de David Madrid protagonizaron una reacción que finalmente se reveló como baldía. El tempranero gol de Pedro Toro hizo pensar en la reacción pero los maños apretaron los dientes y apenas dejaron huecos en busca del sueño de al menos puntuar en un territorio siempre muy complicado. Ahora, los levantinistas ya piensan en su segundo desplazamiento seguido, en este caso a Peñíscola.

No se puede decir que el primer tiempo del Levante UD FS vaya a ser recordado en lo venidero, al menos en lo positivo. Los de David Madrid saltaron a la pista con buenas intenciones, pero el Fútbol Emotion Zaragoza salió revolucionado, con su ya clásica y personalizada defensa que se le atragantó desde el minuto uno a los granotas. No se llegaba arriba con claridad y, por el contrario, conforme avanzaba el tiempo, el equipo dirigido por Santi Herrero se encontraba más cómodo y gozaba de más ocasiones. En el minuto 5, Nano Modrego puso la primera pica en Flandes y batió a Alfonso Prieto. El portero madrileño sí que logró atajar otro disparo del veterano pívot local y también se empleó a fondo para evitar el segundo de la bota de Richi Felipe. Sin embargo, imparables fueron los zapatazos de Retamar en el minuto 16, colando el balón por la escuadra para culminar una acción de pizarra; y otro cañonazo de Johnny que puso a prueba la consistencia de la red.

Finalizó por tanto un primer tiempo en que nada se dio bien y vino bien el paso por los vestuarios, ya que el Levante UD FS ofreció una mejor versión a lo largo de los segundos 20 minutos de juego. Pronto tuvo su primera gran ocasión de recortar distancias gracias a una mano de Nano Modrego que el árbitro señaló dentro del área de castigo. Sin embargo, Pedro Toro no acertó a marcar el 3-1. De lado a lado de la cancha, el cuadro azulgrana se cargó muy rápido de faltas y cometió la sexta cuando faltaban 14 minutos de partido. No hubo que lamentarlo en forma de gol tras el sexto penalti lanzado por Modrego y parado con el pecho por Prieto. Pedro Toro se resarció del fallo en el lanzamiento desde el punto fatídico culminando a la perfección un contragolpe: protegió el esférico hasta que vio el hueco por el que colar la pelota y hacer subir el primer tanto valenciano al marcador. Pero fue el único. A falta de cuatro para el final, David Madrid le puso a Gallo la camiseta del portero-jugador pero la superioridad numérica en ataque no cuajó. De hecho, Esteban envió a la madera una salida rápida con la portería levantinista lógicamente descubierta. Lo dio todo la escuadra granota, pero los tres puntos se quedaron en la capital maña.