Muere un bebé tras arrojarlo a un contenedor de basura en Mallorca

Un bebé ha muerto la tarde de este jueves después de haber sido arrojado desde un coche a un contenedor de basura en Porto Cristo, en Mallorca. El pequeño había sido trasladado con carácter urgente en un coche patrulla hasta el Hospital de Manacor en un intento desesperado por salvarle la vida. No ha podido ser. Investigadores de la Policía Nacional de la Comisaría de la capital de Llevant se han hecho cargo del caso. La prioridad es identificar y detener a la persona que ha arrojado al pequeño al depósito de basura por un presunto delito de homicidio.

Los hechos han ocurrido sobre las seis de la tarde de este jueves. Una mujer se ha percatado de la presencia de un coche y ha observado cómo arrojaban un bulto a un contenedor de basura. El comportamiento de la persona que se ha apeado del vehículo ha llamado poderosamente la atención de la testigo. Al parecer esta se afanaba en ocultar lo que portaba en los brazos antes de tirarlo en el depósito y marcharse. Cuando la transeúnte se ha acercado, ha visto que algo se movía y ha comprobado que se trataba de un bebé.

Tras telefonear al 091 para denunciar la presencia de un bebé en el contenedor, un dispositivo policial se ha activado de inmediato en torno al depósito. En primer lugar, el pequeño ha sido rescatado con sumo cuidado y agentes de la Policía Nacional lo han trasladado con gran premura al Hospital de Manacor. El objetivo primordial era salvarle la vida al niño de corta edad, debido a las bajas temperaturas que se registraban en ese momento. De hecho el neonato no ha podido remontar la situación crítica que afrontaba y ha fallecido en el centro sanitario.

Objetivo: identificar y detener al homicida

De inmediato, investigadores de la Policía Judicial de la Policía Nacional, en estrecha colaboración con agentes de la Unidad Territorial de Costas de la Policía Local de Manacor, han iniciado las pesquisas para tratar de identificar el vehículo y la persona que se había apeado del mismo para arrojar el bebé al contenedor. Para ello se han tratado de recopilar y examinar minuciosamente las grabaciones de las cámaras de videovigilancia de la zona para dar con la matrícula del turismo y con la identidad de quien había puesto, en primera instancia en serio peligro la vida del pequeño al tirarlo al contenedor de basura. Las pesquisas se han intensificado aún más después de constatar que en el hospital adonde había sido trasladado el menor se había certificado su fallecimiento.