El Valencia Basket confirmó anoche que está a la altura de los mejores, no sólo en la Liga Endesa sino en Europa, ante un Real Madrid al que si los árbitros no le echan un ‘capote’ en el tramo final hoy estaríamos hablando de un resultado muy diferente. Pese a ello, el rendimiento global del cuadro taronja es una clara advertencia a los ‘grandes’. Este año hay otro gallo en el corral —pese a que a algunos no les guste—, y ese gallo llega con mucha hambre de ganar títulos.

Y eso que el equipo valenciano ‘regaló’ la primera mitad, pues le costó casi una eternidad encontrar su sitio en el encuentro. Nervioso y sin apenas ideas, los de La Fonteta dieron toda clase de facilidades a su rival en los primeros compases—la primera canasta en juego del Valencia Basket llegó a los siete minutos—. Mirotic y Hettsheimeir campaban a sus anchas por la pintura y el Real Madrid se distanció rápidamente en el luminoso (15-4; min. 5).No sería hasta la entrada de Gelabale en la pista cuando los valencianos lograron frenar algo la sangría local, aunque todavía sin indicios de poder cambiar el signo del partido (20-11; min. 20).

La valoración al final del primer cuarto (25-4) hablaba por sí sola, aunque lo peor era que de esa valoración 5 puntos eran para Gelabale y -1 para el resto del equipo. Era evidente que mucho tenían que cambiar las cosas para que los taronja tuvieran algo que decir ante un líder sólido que castigaba a su rival a la mínima oportunidad. Perasovic lo intentó con Markovic en la dirección que, bien secundado por Dubljevic en el segundo acto, logró dar otro aire al equipo (29-23; min. 24). Pero los de Pablo Laso seguían sin bajar el ritmo ni la efectividad, circunstancia que volvió a complicar mucho las cosas para un Valencia Basket irregular y errático por momentos. Por si fuera poco el rebote —20-13 al descanso— todavía hizo más difícil ese primer intento de remontada que quedó en nada (41-28; min. 20).

Pero todo cambió tras el paso por los vestuarios, empezando por la defensa, mucho más centrada y activa que en todo el primer tiempo. Algo que, para empezar, obligó a los blancos a jugar a otra cosa ante la imposibilidad de seguir anotando desde la pintura. Eso también permitió al Valencia Basket crecer en su determinación ofensiva, lo que aumentó de forma clara los porcentajes. El terrorífico parcial de 2-16 en poco más de tres minutos devolvió a los valencianos al partido inundando, de desconcierto al Real Madrid (51-50; min. 26).

Arrancó ahí un nuevo partido en el que el Valencia Basket no tardó demasiado en ponerse por primera vez por delante (54-55; min. 28). Los errores en el tiro libre estaban condenando a los locales, cada vez más incómodos ante esta nueva propuesta de juego del equipo valenciano, que pese a la reacción llegó al último cuarto por detrás en el marcador (58-57; min. 30) debido a la irrupción de Sergi Llull.

Aparecen los árbitros

Con el partido igualado, llegaba lo previsible, la aparición estelar de los árbitros para desnivelar la balanza. Dos dudosas decisiones en los primeros ataques del Valencia Basket y una técnica incomprensible a Pietrus por simular un empujón dispararon de nuevo al Madrid (63-57; min. 31). García González, Peruga y Soto, con diferente vara de medir para unos y a otros, habían comenzado a hacer su trabajo, pero los taronja no estaban dispuestos a ponérselo tan fácil a ambos —al Real Madrid y a los árbitros—. A base de esfuerzo, carácter y acierto instauraron de nuevo tres veces las tablas en el electrónico (67-67, 70-70 y 76-76). El equipo, como ya anunció Perasovic en la previa, nunca especuló pese a las muchas adversidades aunque, y ya es la novena vez que pasa en esta cancha de forma consecutiva, le faltó fortuna y sxobre todo justicia arbitral para poder llevarse la victoria.

Ficha técnica.

87 - Real Madrid (20+21+17+29): Pocius (2), Suárez (4), Mirotic (16), Hettsheimeir (6) y Llull (14) -quinteto inicial-, Draper (2), Carroll (10), Rodríguez (3), Slaughter (2), Begic (10) y Reyes (18).

84 - Valencia Basket (11+17+29+27): San Miguel, Doellman (19), Dubljevic (21), Kelati (7) y Rafa Martínez (6) -quinteto inicial-, Ribas (5), Markovic (5), Pietrus (3), Gelabale (11) y Lauvergne (7)

Árbitros: Juan C. García, Carlos Peruga y David Soto. Eliminados: Dubljevic (min.37), Kelati (min. 38) y Draper (min.40).

Incidencias: Partido correspondiente a la decimotercera jornada de la Liga Endesa disputado en el Palacio de Deportes de Madrid ante 8.415 espectadores.