Sergio Canales atraviesa por su mejor momento de forma en muchos años y su participación va a ser clave en esta eliminatoria de la Copa del Rey en la que Betis y Valencia CF buscan la gran final. Muy atrás queda ya su trágica etapa en Mestalla con dos roturas de ligamento cruzado de la rodilla en la misma temporada 2011/12 y una tercera en la 2015/16, siendo ya jugador de la Real Sociedad.
A punto de cumplir 28 años (al Valencia llegó con apenas 20), una de las claves de su buen momento es la alimentación. Igual que Denis Cheryshev, que explicaba en su presentación el pasado mes de agosto que cambiar determinados hábitos le ha permitido evitar las lesiones de otras épocas, el futbolista cántabro ha reconocido que optar por una dieta macrobiótica es uno de los factores que ha influido en el bienestar físico que disfruta en esta nueva etapa en el Real Betis. Un cambio en el que ha sido determinante su mujer, Cristina Llorens, gran aficionada a la alimentación sana.
¿Qué es la dieta macrobiótica?
Se trata de una alimentación equilibrada en la que hay proteína, hidratos de carbono, fibra y alimentos que aporten vitaminas y minerales. La dieta elimina al máximo la proteína animal y los lácteos. En cambio se construye a base de cereales integrales, verduras, legumbres, semillas, frutas y frutos secos. Se basa en las estaciones y en alimentación equilibrada, en aprovechar los alimentos de temporada y como es comida japonesa aprovecha los fermentos, las semillas y las algas. Fue desarrollada a principios de los años 20 del siglo pasado por el filósofo japonés George Ohsawa.
