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Recuerdos de Valladolid

La derrota en Pucela supuso un mazazo que inició la caída hacia el descenso, marcada por una de las actuaciones arbitrales más escandalosas contra el Valencia este curso

Recuerdos de ValladolidR. GARCÍA - EFE

Valencia y Valladolid se vuelven a ver las caras, en lo que promete ser un duelo a vida o muerte en la lucha por mantener la categoría. El conjunto de Rubén Baraja debe sacar los tres puntos como sea para salir del descenso y, ni aun así, depende de sí mismo para ello. Y no solo eso, los pucelanos se llevaron la victoria por la mínima de Zorrilla ante el Valencia, por lo que son más de tres puntos lo que hay en juego el jueves en Mestalla. En ese mismo partido en tierras vallisoletanas, el conjunto dirigido todavía por Gattuso (el último a su cargo) vivió uno de los mayores escándalos arbitrales de lo que llevamos de temporada. 

Un penalti clamoroso no pitado, una roja perdonada y, quizás lo más grave por lo que supuso, una falta a Justin Kluivert no señalada en el origen del gol de la victoria del Valladolid. Tres jugadas en las que en primera instancia el colegiado Figueroa Vázquez no aprecia infracciones, y que por parte de Iglesias Villanueva en el VAR no se requiere la revisión del árbitro para deparar justicia. 

Son muchos los puntos que el conjunto de Mestalla ha perdido por la incorrecta o nula intervención del VAR esta temporada (10), pero el de Pucela es el más llamativo. Tres errores clamorosos que, además, significaba el noveno partido sin ganar de los blanquinegros de los últimos diez encuentros, dejando al Valencia a tan solo un punto del descenso, y de nuevo cediendo puntos a rivales directos. 

El Valencia no pudo con un Real Valladolid que llegaba al partido con la cuarta peor racha goleadora de toda la historia de LaLiga

El encuentro no tardó en deparar la primera polémica. Tan solo siete minutos transcurridos del primer tiempo, el central blanquivioleta Joaquín Fernández perdía el equilibrio en un salto y golpeaba con el codo en el rostro a Lato dentro del área, para posteriormente acabar aterrizando sobre el de la Pobla de Vallbona derribándole. Incomprensiblemente el colegiado no apreció infracción, pero más grave todavía fue Iglesias Villanueva desde la sala VOR, que no consideró oportuno avisar a Figueroa Vázquez. Tan solo diez minutos después, el conjunto blanquinegro, en ese partido enfundado de naranja y negro, también reclamó un penalti sobre Lino que tampoco se señalizó, aunque este menos claro. 

El partido siguió su transcurso y a los diez minutos del arranque de la segunda mitad, de nuevo protagonista el arbitraje. Una entrada durísima de Álvaro Aguado con los tacos por delante golpeaba en el pie apoyado sobre el verde de Castillejo, pudiendo lesionar de gravedad al malagueño. Esta vez el trencilla sevillano sí apreció la falta, aunque tan solo amonestó al centrocampista jienense. El VAR de nuevo se cebó con el Valencia y no corrigió la decisión de Figueroa manteniendo en el campo a Aguado. Al minuto, Pacheta muy acertadamente sustituyó a su futbolista amonestado, evidenciando más si cabe lo cerca que estuvo su equipo de quedarse con diez. 

Los jugadores del Valladolid celebran la victoria contra el Valencia

Pero la traca final no llegaría, precisamente hasta los minutos finales de encuentro. El cuadro local anotó el tanto de la victoria tras un despiste imperdonable de la zaga valencianista, pero con un detalle en el que no se incidió en directo debido al mazazo que supuso. En el origen de la jugada del gol, instantes previos a recibir el balón el futbolista que sirvió la asistencia mortífera para Larin, Kluivert recibió una falta más que clara mientras estaba en posesión de esférico. Gonzalo Plata golpeaba la rodilla del atacante neerlandés antes de recuperar el balón para su equipo. Una falta clara, que debió hacer rebobinar la acción y anular el gol para los vallisoletanos. Incomprensiblemente no fue así, y más teniendo en cuenta que al Valencia este año le han anulado hasta dos goles por el mismo motivo, ambos ante el Atlético de Madrid, y por faltas mucho más dudosas. Doble vara de medir con el cuadro valencianista, que este curso está siendo el equipo más perjudicado de largo de la liga española.

La realidad es que el cuadro de Gattuso no mereció ganar dicho partido por méritos deportivos, pero se le impidió sumar desde el VAR, en lo que fue uno de tantos partidos ensuciados por los errores arbitrales contra el Valencia, que tantos puntos están costando.

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