Cinco «goals» a la Primera

El estreno en Primera en Mestalla, en 1931, se salda marcando un 5-1 al Real Unión de Irún, con el abuelo de Unai Emery bajo palos

El célebre viñetista Masià caricaturizó de esta manera la goleada que el Valencia le endosó al Real Unión y a su portero, el Pajarito Emery

El célebre viñetista Masià caricaturizó de esta manera la goleada que el Valencia le endosó al Real Unión y a su portero, el Pajarito Emery / EMV

Vicent Chilet

Vicent Chilet

El 29 de noviembre de 1931. Con un vendaval de fútbol y goles, el Valencia se presenta en Primera división, firmando un estreno de ensueño en la segunda jornada del curso 31-32. El equipo de Randolph Galloway no muestra piedad de todo un ilustre rival, el Real Unión de Irún. El conjunto irundarra, triple campeón de Copa y con su mítico capitán Patxi Gamborena al frente, cae por 5 goles a 1 en un Mestalla entregado. Juan Costa, por tres ocasiones, y Jesús Navarro con un doblete, perforaron la portería defendido Antonio Emery, el «Pajarito» Emery. Uno de sus futuros nietos, Unai, se convertiría casi 80 años después en entrenador del Valencia. Con este inapelable triunfo, el Valencia se resarce del doloroso debut en la máxima categoría, una semana antes, cuando cayó en Sarrià frente al Espanyol por 3-0. «Así parece que es la primera división. Toques de duelo y volteos de alegría», concluye Zafrilla, el cronista de El Mercantil Valenciano. El Valencia no abandonará la categoría hasta el descenso de 1986.

Curiosamente, el Valencia disputa su primer partido en Primera como local… vestido de rojo. El conjunto de Mestalla tiene esa deferencia con su rival, que llegó de su largo viaje con su clásico equipaje blanco. Desde el primer minuto de juego, literalmente, el Valencia se erige en protagonista del duelo. A los 60 segundos de juego, un «shoot» de Juan Costa desde la frontal del área se le escapa entre las manos a Emery.

El tanto, sólo es el inicio de un dominio abrumador del Valencia. A los 12 minutos, Enrique Molina realiza un gran cambio de orientación hacia Antonio Sánchez. El extremo de Chera centra a media altura para que de nuevo Costa marque el segundo. Nada detiene el empuje del Valencia. Ni siquiera las arengas a sus compañeros de un Gamborena mayúsculo, cuyo duelo con Molina será titánico.

En el minuto 33 se intercambian las tornas y es Costa quien asiste a Jesús Navarro, para que el atacante canario, con oportunismo, coloque el tercero. A los dos minutos de la reanudación, con el partido ya sentenciado, Torredeflot sirve a placer el cuarto tanto del Valencia a Navarro, que marca el segundo en su cuenta particular. Masià, viñetista de El Mercantil Valenciano, reflejará con humor los goles que «el canario» introduce en la jaula de Emery, apodado Pajarito.

Herido en su orgullo, en el minuto 54 Gamborena recorta las distancias de un Real Unión de Irún que en los minutos siguientes, asedia a Nebot con sendos disparos al poste, por mediación de Etxezarreta y de la estrella Luis Regueiro, que a las pocas semanas fichará por el Madrid. A los 24 minutos, Costa cierra con su triplete el marcador de un estreno inolvidable, que acaba con un fortuito rodillazo de Urtizberea en la cabeza del meta Nebot, que queda k.o y debe ser suplido por suplido por Enrique Cano.