Estos son los peores defensas de la historia del Valencia

Como ocurre en todos los equipos, el mercado de fichajes suele venir cargado de ilusión y esperanza por parte de los aficionados. Grandes desembolsos o llegadas de jugadores que, sobre el papel, mejorarán la plantilla actual. Y no siempre es así.

El Valencia CF asume que hace tiempo que no ficha un defensa diferencial que pueda tirar del equipo a base de liderazgo y es que prácticamente el último fue Ezequiel Garay. Es mucho el dinero invertido en defensas en la 'era Lim', destacando la millonada abonada por Abdennour en su momento (22 millones). El club de Mestalla ha fichado a lo largo de su historia reciente grandes defensas que se metieron a la afición en el bolsillo con sus intervenciones... Djukic, Ayala, Pellegrino, Otamendi, Mustafi, Carboni, Angloma, Marchena... Todos ellos tienen un lugar destacado en la memoria colectiva del valencianismo, pero no siempre fue así. Hay otros que se puede decir que forman parte de la leyenda negra del Valencia CF. 

Los ha habido en todas las épocas, estos son solo algunos de los fiascos de fichajes más recordados en el peor sentido de la expresión:

Aderllan Santos

Coste del fichaje: 9'5 millones de euros.

En Valencia muchos no terminan de entender cómo este chico jugó en el primer equipo. Llegó en verano de 2015 a Valencia procedente del Sporting de Braga y con la bendición del entonces entrenador, Nuno Espirito Santo. Poco tardó en demostrar que no estaba el nivel del Valencia y pasó a ser un descarte habitual en las convocatorias. Tras dos campañas en Mestalla fue cedido a dos equipos año y medio a Brasil. Ahora, el Valencia lo ha regalado al futbol saudí.

Asier del Horno

Coste del fichaje: 7 millones de euros.

El Chelsea lo fichó a precio de oro y se desprendió de él la temporada siguiente tras una desastrosa eliminatoria ante el Barcelona en la que acabó expulsado. Y ahí estaba el Valencia: siete millones y seis temporadas de contrato. Nunca se adaptó e inició un carrusel de cesiones que no cuajaron, quizá porque el propio lateral zurdo no estaba por la labor. Hasta que llegó al Levante donde triunfó a pesar de una gravísima lesión en el tendón de Aquiles. Acabó contrato y se marchó libre al Ciutat.

Aymen Abdennour

Coste del fichaje: 22 millones de euros.

El internacional tunecino llegó al Valencia como sustituto de Otamendi, uno de los mejores centrales que ha vestido la elástica valencianista en su historia. Las comparaciones son odiosas y el zaguero africano aterrizó desde el Mónaco como una alternativa más que notable, pero nunca llegó a rendir ni cerca de su mejor nivel y terminó siendo regalado tras una cesión al Marsella. Turquía, Catar y la segunda francesa fueron sus últimos destinos hasta quedarse sin equipo el pasado verano.

Jorge Sáenz

Coste del fichaje: 2 millones de euros.

El Valencia CF incorporaba al que fue el mejor central de Segunda División como líder de la zaga del Tenerife. Internacional sub-21, se trataba de una apuesta de futuro, ya que Paulista, Garay y Diakhaby le cerraban el paso, además de encontrarse todavía a la espera de salida Vezo y Murillo. El Valencia cometió el error de mandarle como cedido dos años al Celta de Vigo como parte del acuerdo por Maxi Gómez que también incluía a Santi Mina. No gozó de oportunidades, frenando su gran proyección. Experiencia como cedido luego en el Marítimo portugués y en el Mirandés le sirvieron para ganar confianza y ahora es un habitual del Leganés, equipo que lo fichó del Valencia por 400.000 euros este pasado verano.

Thiago Carleto

Coste del fichaje: 600.000 euros.

Hubo quien se frotó las manos pensando que se trataba del 'nuevo Roberto Carlos'. Efectivamente, compartía nacionalidad y posición en el campo (lateral izquierdo), pero hasta ahí llegó toda opción de buscar parecidos. Llegó al Valencia CF siendo sólo un niño de 19 años procedente del Santos brasileño. Su participación con el club de Mestalla se reduce a los 76 minutos que disputó frente al Málaga tras entrar en sustitución del lesionado Emiliano Moretti. A los pocos meses de llegar, fue cedido al Elche, donde sólo aguantó un par de meses antes de marcharse de nuevo a Brasil con la carta de libertad. Se convirtió en un auténtico trotamundos, haciendo la maleta cada poco tiempo hasta fichar por 19 equipos diferentes. Casi toda su carrera la pasó en su país, aunque también pasó por España, Paraguay, Portugal y Arabia Saudí. Lee más sobre Thiago Carleto, aquí.