Cuando parecía que a ninguno de los dos equipos le quedaban argumentos para hacer el gol de la victoria, una falta tonta e innecesaria de Vezo la puso en el área Trigueros para que Mario Gaspar, desviando apenas el balón con la coronilla, lograra el tanto que mantiene intactas las aspiraciones del Villarreal de alcanzar la quinta plaza. Queda a solo dos puntos del Betis aunque con un partido menos, el que no jugó en el Camp Nou ante el Barça por coincidir con la final de la Copa, mientras el Valencia CF no podía ofrecer una vez más un triunfo a sus aficionados para celebrar el regreso a la Champions League que certificaba más de dos horas antes de arrancar el partido en el estadio de la Cerámica por la derrota del Betis.

El Valencia CF se había quitado el peso de la Champions ya antes de salir a jugar y eso, de entrada, parecía no variar el planteamiento ni el objetivo de ganar el partido. El peso y el control del juego lo llevó casi siempre el Villarreal aunque fueron los de Marcelino los que golpearon primero y pudieron adelantarse por dos veces en el marcador. El primer recurso era forzar errores y recuperar el balón en terreno amarillo. Si no, lanzar balones en largo para las galopadas de Soler, Guedes o el propio Mina. Por ahí pudo hacer daño si no llega a ser por las oportunas intervenciones de Asenjo. Primero al sacar un balón muy difícil a Rodrigo, tras ua muy buena jugada lanzada por Parejo y con un centro excelente de Santi Mina. Era el minuto 25 y solo tres después, en una acción muy protestada por posible fuera de juego, el gallego erró un mano a mano con el meta, que pudo rechazar el disparo final de Mina.

Pero Calleja también tenía bien aprendida la asignatura del Valencia CF y su equipo buscaba una y otra vez el costado de Vezo con Rukavina y sobere todo Cheryshev, el ruso que jugó hace un par de temporadas durante unos meses en Mestalla y que literalmente volvió loco al portugués con sus arrancadas que culminaban casi siempre con centros precisos. En una de ellas, ya en el 41, su balón al área no lo pudo rematar en condiciones Bacca en la boca de gol gracias a que Gabriel le estorbó lo suficiente. Instantes después, el colombiano recogía con fortuna un rechace tras una despeje de Garay y estaba a punto de marcar.

Con el cuchillo entre los dientes decía el presidente Anil Murthy que había que ir ante el Villarreal y, si en algún momento llegó a sacarlo, el equipo lo escondió en la segunda mitad, muy floja en líneas generales en la que se dedicó a defender y apenas generó peligro en el área del Villarreal. Si acaso, cierta inquietud rondaba cuando entraba en juego Rodrigo, pero si no logró más con Soler, Mina y Guedes mucho menos lo iba a hacer con los sustitutos, especialmente Vietto y Andreas. Zaza, que debutó aquí con la camiseta del Valencia CF la pasada temporada, no tuvo un día feliz, vio la primera parte desde el banquillo y la segunda desde la banda.

Los de Calleja, que necesitaban la victoria, sí lo buscaron siempre aunque se encontraron con un Valencia CF bastante solvente en defensa, más allá de errores individuales que al final le acabaron costando el partido en esa acción decisiva, cuando ya no parecían haber ni ideas ni fuerzas para levantar el empate a cero inicial. El Villarreal celebraba ese gol importrante por todo lo alto y, minutos después, los jugadores del Valencia celebraban la clasificación para la Champions League con sus más de mil seguidores en la grada visitante, aunque la derrota hizo que la felicidad no fuera completa.Ficha técnica interactiva: