El primer fichaje de la era Longoria ya es una realidad. Se trata de Uros Racic, centrocampista del Estrella Roja de Belgrado que a sus 20 años está considerado como un valor de futuro capaz de convertirse a medio plazo en un jugador de primera magnitud. El responsable del área, como ha venido contando SUPER, tenía licencia de Peter Lim para hacer un fichaje de estas características, una apuesta con su sello personal. El cazatalentos del Valencia CF se puso manos a la obra y echó mano de su cartera de jugadores controlados en la época al frente de la captación de la Juventus: Boubakary Soumaré, Zaydou Youssouf... El elegido es Racic. El club de Mestalla ha llegó ayer a un acuerdo total con el club propietario de sus derechos por una cifra cercana a los dos millones de euros -1,7 en concepto de traspaso más un 20% de una futura venta- y el jugador, que cobrará 750.000 euros cada año, firmará por las próximas cuatro temporadas. El futbolista, que es un pivote fuerte de 1,93 metros, es titular con la selección Sub-21 de su país y la idea es que sea el quinto centrocampista del equipo de Marcelino la temporada 18/19.
Bolonia o Gante iban tras su pista pero el Valencia CF se ha movido rápido y se lo lleva a última hora. El serbio ha jugado 22 partidos en la Superliga de su país, 10 encuentros en Europa League y dos en la Copa y aunque debutó en la 15/16, fue la temporada pasada cuando comenzó a tener algo de protagonismo en la élite. Le restaba un año de contrato y el Valencia CF ha sabido aprovechar el contexto para llevarse al jugador. Aliviados por la próxima salida de Cancelo -su marcha a la Juventus está en camino-, el club ha pasado a la acción con una ofensiva total por fichar a una joven promesa en los últimos días. Longoria ha manejado distintas alternativas hasta ultimísima hora y hay circunstancias que han decantado la balanza definitivamente por el serbio. Dos son las claves que han llevado al Valencia CF a elegir a Racic, además de sus virtudes propias. La primera, es que el Estrella Roja tenía problemas económicos y necesitaba el dinero del traspaso, algo que no sucedía por ejemplo con el Girondins de Burdeos, que goza de mayor salud financiera y ha endurecido su postura en las últimas reuniones mantenidas con el Valencia. El club francés, de hecho, radicalizó su posición y dejó muy poco margen en la última reunión entre las partes, llevada a cabo menos hace menos de 24 horas, pese a que en Mestalla pensaban que podían cristalizar la llegada de Youssouf a lo largo de la próxima semana.
El segundo factor es el rol que desempeñará Racic en el Valencia CF de Marcelino. El futbolista serbio será el quinto centrocampista del equipo la próxima temporada, si bien el hecho de que acepte bajar al filial en caso de que no juegue ha resultado decisivo. Con Youssouf, por ejemplo, la operación se planteaba en otros términos: sería jugador de la primera plantilla al cien por cien. El Valencia CF lo tiene todo atado con el jugador serbio y su fichaje, el primero del verano tras Kondogbia, será oficial pronto.
